Detroit rompió la racha de Los Ángeles

, Los Lakers de Los Ángeles necesitan un milagro, un milagro médico para ser precisos. El escolta Byron Scott sufrió un desgarre muscular en el muslo izquierdo durante los entrenamientos del lunes, y faltará a un mínimo de dos partidos de la final de Liga. Es posible que ni siquiera se recupere por completo, lo que dejará a los Lakers cojos en el ataque y flojos en la defensa. Sin él, simplemente, no tienen el nivel de juego para batirse con los Detroit Pistons. Por muy grande que sea Magíc Johnson, no podrá solo contra los bases de Detroit, Isiah Thomas, Joe Dumars y Vinnie Johnson, los tres mosqueteros de la NBA. Tres contra uno siempre ganan, y así pudo comprobarse en el primer partido de esta final.

El resultado del martes fue 109 a 97, un margen de victoria cómodo y algo sorprendente. Los Pistons llevaron el peso del partido desde el segundo tiempo y gozaron de ventajas tan amplias como de 21 puntos. Thomas jugó únicamente tres tiempos, y fácilmente sumó 24 tantos y nueve asistencias. Dumars lo acompañó con 24 y siete. Johnson, el llamado Microondas, hizo 19 tantos en 21 minutos.Magic Johnson les respondió con 17 puntos y 14 asistencias pero no le encontró solución al partido. En más de una ocasión Tony Campbell, el sustituto de Byron Scott, corrió en dirección equivocada, echando a perder fuera de juego un pase de Johnson.

"Nos dieron un tortazo y punto", afirmó el técnico de los Lakers Pat Riley. "Si vamos a llorar por la baja de un jugador, entonces será mejor ceder el título y enviar los resultados por correo. Necesitamos jugar con más agresividad". Los Lakers estaban invictos durante 11 partidos de play-offs. Es increíble con qué rapidez se dio la vuelta a la tortilla.