La Internacional Socialista aprueba el proyecto político pluralista de Nicaragua

La Internacional Socialista ha renovado en Managua su solidaridad con la revolución nicaragüense, aunque, en un deseo de que esto no se interprete como un cheque en blanco, ha especificado en el comunicado final que su apoyo tiene como destinatario "el proyecto político democrático y pluralista de la Junta de Reconstrucción".

Los socialistas manifestaron al término de la reunión que los dirigentes del Frente Sandinista les habían dado todo tipo de seguridades de que el proceso iba a mantenerse en un marco de pluralidad y economía mixta.Felipe González, que preside el comité creado por l...

La Internacional Socialista ha renovado en Managua su solidaridad con la revolución nicaragüense, aunque, en un deseo de que esto no se interprete como un cheque en blanco, ha especificado en el comunicado final que su apoyo tiene como destinatario "el proyecto político democrático y pluralista de la Junta de Reconstrucción".

Los socialistas manifestaron al término de la reunión que los dirigentes del Frente Sandinista les habían dado todo tipo de seguridades de que el proceso iba a mantenerse en un marco de pluralidad y economía mixta.Felipe González, que preside el comité creado por los socialistas en defensa de la revolución nicaragüense, puntualizó que "si se diese un proceso político en el que terminase por desaparecer el pluralismo, que es el modelo en el que nosotros nos reconocemos, dejaríamos de identificarnos con él, aunque lo respetaríamos igual que respetamos el proyecto de Cuba".

Los socialistas europeos y americanos, que celebraron su primera reunión en Managua tras la constitución de este comité de apoyo en noviembre del pasado año, han expresado con claridad su comprensión por las dificultades a que está sometido el proceso nicaragüense, tanto de orden interno como externo, pero también han subrayado que su solidaridad se extiende hasta donde dure el proyecto pluralista.

Esta decisión tiene su importancia en un momento en el que la dificultad para entenderse entre los sandinistas y los partidos de oposición se hace cada día más patente. El Gobierno acusa, por otra parte, al sector privado, que sigue controlando más del 60% de la economía, de estar descapitalizando deliberadamente al país (se da la cifra de seiscientos millones de dólares en el pasado año), en un intento desestabilizador. Los sectores sandinistas más radicalizados abogan ya abiertamente por nacionalizar y entrar en un camino de economía socializada.

Un acuerdo nacional

Desde hace dos semanas se está celebrando un foro nacional de debate político en el que sandinistas y opositores tratan de alcanzar un gran acuerdo nacional, sin que hasta ahora se haya avanzado lo más mínimo. Es bien indicativo que la última reunión se haya estancado en torno a lo que cada cual entiende por democracia.

Dentro de este contexto, los miembros del comité socialista, del que forman parte también el secretario general de la Internacional Socialista, Bernt Carlson, y el venezolano Carlos Andrés Pérez, han instado a todas las fuerzas políticas y sociales nicaragüenses a que realicen un esfuerzo común para intentar resolver sus problemas "en un clima de diálogo y respeto mutuo".

Los representantes de la Internacional Socialista se han mostrado preocupados por el hostigamiento político y económico que sufre la nación nicaragüense y por la retirada de la ayuda norteamericana. Tras denunciar las agresiones fronterizas, que el pasado día 23 culminaron con la muerte de siete nicaragüenses junto a la frontera de Honduras ("los muertos siempre caen a este lado de la frontera", dijo Felipe González), los socialistas llaman a la comunidad internacional para que ayude al pueblo nicaragüense a construir "su futuro en paz, justicia y libertad".

El secretario general del PSOE calificó de torpe la política norteamericana de cercar el proceso nicaragüense y consideró falsa la tesis de Estados Unidos de que el proyecto político sandinista conduce inevitablemente al comunismo. Por el contrario, enfatizó que el programa de la Junta se mueve en un campo de respeto a las libertades y economía mixta, con una abierta vocación de transformación social.

"En la medida en que todos contribuyamos a sostener y hacer fructificar este proyecto", termina el comunicado de la reunión, "mantendremos abierta la esperanza para todos los pueblos de América Latina y del mundo en general que luchan por su liberación".