"Urge cerrar el período de transición"
Es preciso cerrar el ya largo período de transición que, por su provisionalidad, no es evidentemente el más adecuado para estimular las inversiones, dijo ayer en la junta general del Banco Urquijo, Jaime Carvajal, consejero director general del primer banco industrial del país y senador por designación real.El señor Carvajal pidió la definición del marco general y las reglas del juego después del proceso de cambio político. Esta definición estará contenida en la Constitución. Pidió también la normalización de la acción del Gobierno, las elecciones municipales y, en su caso, las legislativas. la culminación de la reforma fiscal y del marco para la acción sindical en la empresa. También destacó la urgencia de definir y adoptar sin ambigüedades el modelo de economía de mercado típico de las sociedades democráticas europeas.
Al principio de su intervención, Jaime Carvajal destacó la eficacia del proceso de consolidación de la democracia -elecciones generales y consenso constitucional- y la corrección del planteamiento de los pactos de la Moncloa. En el capítulo de críticas puede señalarse la anotación de que la política de rentas debía haber sido más ajustada. Señaló que la coincidencia de crisis económica y reformismo dificultaba la actuación de la banca y de las empresas aunque expresó su confianza en que ambas instituciones saldrán robustecidas de este período.
El presidente del Urquijo, Juan Lladó comenzó su intervención, improvisada como en otras ocasiones y que duró tres cuartos de hora, en los siguientes términos: «La única razón de que esté aquí después de cincuenta años de vida activa en el banco, es explicarles por qué no se ha hecho la ampliación gratis de una acción nueva por cada cinco antiguas que les prometí en la anterior junta.» No se ha hecho la ampliación por la baja ininterrumpida de las cotizaciones que desaconseja una operación de este tipo. Además, la reducción de los activos empresariales no justifica nuevas emisiones de papel.
Al parecer, el señor Lladó ha manifestado su deseo de retirarse de la presidencia del banco como parece indicar el tono del comienzo de su discurso.
Al analizar la evolución bursátil, señaló que prevé una recuperación entre otras cosas porque los valores liquidativos de las empresas (al menos las de su grupo) están muy por encima de las cotizaciones. Sobre el momento bancario dijo que era tendencioso resaltar que los bancos siempre ganan, incluso en épocas de crisis. «Nos hemos visto perjudicados enormemente en la cartera de títulos y en los créditos, por ello se han constituido reservas especiales.»
En relación al panorama político y económico general opinó que aun no era hora de lanzar la reactivación pero que es urgente crear un clima de confianza, pues sin el no hay ahorro ni inversión.
Finalmente, propugnó lo que en frase de R. Barre llamó un «pesimismo activo». es decir, ser realistas. pero luchar y trabajar para salir de la crisis.
Ejercicio 1977
Sobre el pasado ejercicio cabe destacar los siguientes datos: el beneficio neto antes de impuesto se sitúa en 3.330 millones de pesetas, prácticamente igual que el ejercicio anterior. De esta cifra, L200 millones se destinan al saneamiento de la cartera de valores y 1.254 millones a dividendo. Esta cifra supone un dividendo neto del 14%, que es el más alto de la banca. La cifra de inversiones industriales (compra de valores) en el ejercicio es de más de 4.000 millones, con crecimiento del 23%. Este aumento se produce por la asistencia del banco a todas las ampliaciones de capital de las sociedades incluidas en su cartera.En materia de nuevos servicios el Urquijo ha llegado a un acuerdo con la sociedad American Express para emitir su tarjeta de crédito y pretende desarrollar su intervención en el mercado de renta fija propiciando la liquidez de nuevas emisiones y asesorando a las empresas que quieran recurrir a este sistema de Financiación.
En el turno de ruegos y preguntas intervinieron diversos accionistas en términos similiares a los habituales en anteriores juntas generales de bancos.
