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Muchos goleadores sólo son rentables en campo propio

En un total de catorce jornadas, 137 jugadores de Primera División han gritado la palabra mágica del «¡goooool!». Los tan buscados goleadores escasean cada día más y casi todos ellos son jugadores para andar por casa. Sólo seis hombres han logrado un mínimo de tres goles en los desplazamientos realizados por sus equipos. Los demás, números cantan, juegan maniatados, por las defensivas tácticas de sus entrenadores o no quieren dar la cara.

Actualmente, Santillana podría considerarse como el goleador compIeto; de sus catorce goles, siete los marcó en el Bernabéu, seis fuera y uno de penalti. Otros jugadores que mantienen también una tónica de regularidad son sólo Morete -cinco en casa, tres fuera y uno de penalti-, Alvarito -cuatro en casa y tres fuera- y Gómez Voglino -tres y tres-. Ferrero y Corominas han logrado, asimismo, tres goles fuera de sus terrenos de juego respectivos con la circunstancia de que en El Molinón el sportinguista sólo ha marcado un tanto y en El Helmántico, el salmantino ninguno.Todos los demás goleadores de mayor o menor fama han tenido un rendimiento prácticamente nulo de cara al gol cuando actuaron fuera. Así, tenemos el caso de Kempes, que de sus quince goles, diez los ha logrado en casa Vcuatro de penalti; el de Rubén Cano, con nueve goles marcados, cinco en el Manzanares y tres de penalti, y el de Satrústegui, con diez goles, ocho de ellos en Atocha. Luego está otra serie de jugadores de menor rentabilidad goleadora en esta temporada, quizá porque no han sido capaces de marcar ni un sólo gol fuera de casa. Todos los conseguidos fueron al amparo del juego ofensivo del equipo y de la hinchada. En este caso se encuentran Jeremías, Jiménez y el sevillista Rubio, con cinco goles, y Asensi, Gordillo, Pachín y Sitja, con cuatro. En otro orden se encuentran los jugadores que llevan un regular número de goles gracias a que lanzan penalties. Comentados ya los casos de Kempes y Rubén Cano, están Dani, Marañón y López Ufarte. El bilbaíno, de seis goles, tres los marcó de penalti; el españolista, de seis, cuatro, y el realista, de cinco, dos.

Los equipos que cuentan con más jugadores que hayan sido capaces de marcar algún gol son Madrid y, Betis, con diez cada uno; nueve tienen Athletic, Barcelona y Español; ocho, Atlético de Madrid, Cadiz, Elche, Rayo Vallecano y Salamanca; siete, Sporting y Valencia, y seis, Burgos, Hércules, Las Palmas, Rácing, Ral Sociedad y Sevilla.

Segunda División

En Segunda División, y tras dieciocho jornadas disputadas, es mayor el número dejugadores que han logrado al menos tres goles en las salidas de sus equipos. También existen los casos de jugadores para andar por casa, como son Bío -ocho goles en casa y uno fuera- y Odair -cinco en casa, cuatro de penalti y uno fuera.

El actual máximo goleador es el coruñés Castro, con cinto goles en Riazor y seis fuera. En una línea pareja, pero de menor efectividad, se encuentran el céltico Vavá, el alavesista Quiles y el tinerfeño Lolín, todos ellos con un gol en casa y tres fuera. El murciano Alvarez también ha marcado tres goles fuera, pero ninguno en casa. También el ovetense Sebas ha logrado más goles fuera del Carlos Tartiere, donde hizo dos, mientras que jugando fuera marcó cuatro.

El equipo que tiene más goleadores en sus filas es el actual líder, el Huelva, seguido del Osasuna y Sabadell, con diez. El Castellón es el contrapunto con tan sólo cinco hombres que han logrado marcar en lo que llevamos de temporada.

Es en esta División donde un jugador tiene el récord de marcar más jornadas seguidas. Este jugador es Alonso, que durante cinco jornadas fue protagonista de los goles del Zaragoza. Durante cinco jornadas seguidas también marcó Odair, pero en tres de ellas lo hizo de penalti.

En Primera División hay cuatro jugadores que han logrado marcar cuatro domingos consecutivos: Carlos, Morete, Santillana y Argote, aunque este último lo hizo en una ocasión de penalti. Hay que señalar que Kempes es el único jugador que de momento ha logrado marcar en todos los partidos jugados en casa, si bien una vez lo lograra mediante la transformación de un máximo castigo, Kempes también tiene, junto con Satrústegui, la hazaña de marcar cuatro goles en un mismo partido. En Segunda División, Castro también logró esa misma marca.

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