Los artífices de la exhibición de España ante Costa Rica, uno por uno

¿Jugó?

Para saber del portero del Athletic hubo que acudir a las alineaciones. Nadie se benefició más de una Costa Rica fantasmal que él. Ningún tiro a puerta recibido y, lo que es peor, ni siquiera un medio acercamiento tico. La nada más absoluta. De la siguiente cita, contra Alemania, se podrá sacar alguna conclusión del meta. Con el pitido final, saludó a los aficionados españoles detrás de su portería, recogió las cosas y se supone que se marchó a la ducha. En realidad, no la necesitó.

Una tarde en paz

Pachucho y con catarro Carvajal, Luis Enrique dio carrete al lateral navarro. Con menos vuelo que Jordi Alba, como era previsible por sus características, disfrutó de una tarde-noche plácida en Al Thumama. Nada hubo que defender ni de qué protegerse. Su continuidad será una de las incógnitas contra los germanos.

Un pivote en defensa

Pivote de referencia de Pep Guardiola en el City, Luis Enrique prescindió de Eric García y tiró de él como central para buscar salida de balón y juego aéreo. Ya lo usó ahí en la segunda parte de la victoria contra Portugal (0-1), hace dos meses, que le dio el pase a la Final a Cuatro de la Liga de las Naciones. En realidad, no hizo falta ante un rival inexistente. Su presencia es otra de las cuestiones que quedan en el aire para las próximas citas.

Esperando a Alemania

Mediada la segunda parte, con 4-0 y visto el secarral ofensivo de Costa Rica, se animó a lanzarse al ataque. No pasó nada, pero así salió del aburrimiento, que no era poca cosa a esas alturas de la fiesta ofensiva española. Cero exigido en un partido que solo se disputó en una dirección. La tarde le sirvió para estirar músculos. El domingo, contra Alemania, las obligaciones serán otras.

Asistencia y penalti

Más profundo que Azpilicueta, como era de esperar, resultó muy dañino para una defensa tica cadavérica. Asistió para el 2-0 de Asensio en una acción que ha facturado cientos de veces: se procura una autovía por la izquierda y pase atrás para que el atacante haga lo suyo. Y a través de él llegó también el tercero. Se internó dentro del área y, pese a estar rodeado, un veterano como Óscar Duarte (33 años) se comportó como un becario de primer día. Le metió la pierna sin que el lateral tuviera muchas salidas y pena máxima clara. Asistencia, penalti forzado y a descansar en el 64. Entró Balde.

El director de la orquesta…

A Busi le sigue sentando como un guante la selección, y más todavía escenarios de partido como este de Costa Rica, un conjunto estéril en ataque y que, por lo tanto, no le obliga a correr hacia atrás, que es donde más se le notan las costuras. No fue el caso esta vez. Al primer toque y siempre clarividente para saber dónde y cómo dar continuidad, el azulgrana fue la primera lanzadera del fútbol de toque con el que España se destapó en el Mundial. El ideólogo de lo que busca la Roja. Con la faena hecha, se retiró a guardar fuerzas en el 65, relevado por Koke.

… Y el violinista

Busquets es el director y Pedri, el violinista. Cautivó en su primera aparición en un gran torneo internacional, en la Eurocopa de 2021, y en su estreno mundialista el joven canario dejó otra ración de buenas pisadas. El excelente arranque de España siempre pasó por él, hábil para recibir donde debía y pinchar donde tocaba. Para el minuto seis, ya le había lanzado un gran pase cruzado a Dani Olmo. A la segunda, pared con el catalán del Leipzig y 1-0. Puro perfume para un arranque de campeonato muy alentador en el vestuario de Luis Enrique. Terminado el recital, en el 57 fue sustituido por Carlos Soler.

El “MVP” del festival

Situado de entrada unos metros por delante de Busquets y Pedri, le costó arrancar, pero acabó con el cartel de MVP. Mucho tuvo que ver su excelente diana, el 5-0. Agarró un centro de Morata a la frontal y enganchó un disparo sensacional con el exterior que golpeó en el poste y se coló. Con 18 años y 110 días, se convirtió en el tercer goleador más joven en toda la historia de los Mundiales, solo por detrás de un tal Pelé (17 años y 241 días) y el mexicano Manuel Rosas (18 años y 93 días). De paso, fue el debutante español más joven en una Copa del Mundo.

Doblete

Con 2-0, penalti y Luis Enrique dio instrucciones para que el azulgrana se encargara de ejecutarlo. Lo hizo como quiso. Envió a Navas a un lado y la mandó flojita a la red. Y luego él puso el cuarto. Porfió por una pelota, se revolvió entre Keylor y Bryan Oviedo (32 años, otro veterano quebrado), y para adentro. Justo antes de que el técnico asturiano le diera aire y lo cambiara por Morata.

Del trastero a titular mundial

De lo más profundo del banquillo del Madrid hace poco más de un mes a titular a las primeras de cambio en Qatar. El otoño le ha sentado bien al balear, jugador ciclotímico. Ausente Morata, se ubicó de falso nueve y no tardó en hacerse presente en medio de la fabulosa puesta en escena de la selección. Se le fue por un dedo un disparo a pase de Pedri (cómo no) y a la segunda colocó el 2-0 en una asistencia de Jordi Alba. De más a menos, como es habitual en él, tuvo el cuarto al principio de la segunda mitad en un disparo muy claro desde la frontal. Fue sustituido por Nico Williams en el 69.

Con él empezó la goleada

Recién salido de una rotura de ligamento interno, hubo pista para él nada más empezar el campeonato. Se sabía que es muy del gusto de Luis Enrique, y no tardó en confirmarse. Después de fallar un primer intento, embocó la siguiente. Se alió con Pedri, con quien cosió una pared, mandó a la lona a Óscar Duarte con un toquecito a la media vuelta, y salvó con clase la salida de Keylor Navas. Con él empezó todo. El único de arriba que se quedó los 90 minutos.

“Gracias, Navas”

Keylor Navas despejando un centro de Nico Williams como un colegial, blando y dejando la pelota muerta en el punto de penalti. Lo agradeció encantado el nuevo jugador del PSG para colocar el sexto. España ya no atacaba con tanta saña, pero los regalos nunca sobran.

El madrileño recoge los restos

Uno de los ausentes del prometedor estreno. “Morata y 10 más”, advirtió Luis Enrique hace un año y medio, en la Eurocopa, cuando los focos se posaron sobre él, y no para bien. En Al Thumama, sin embargo, fue el sacrificado para disponer una delantera con tres atacantes móviles. El resultado general fue perfecto. Compareció ya con 4-0 y todavía tuvo tiempo de subirse al carro de la goleada. Pocos se quedaron sin su alegría. El séptimo fue suyo.

Del sofá al Mundial

Hace menos de una semana estaba tumbado en el sofá, en la vida contemplativa de los futbolistas que se quedaron a esperar el regreso de las ligas nacionales, y este miércoles debutó con España y en un Mundial. Es el duodécimo jugador que se estrena como internacional absoluto con la selección en una Copa del Mundo y el primero desde Albert Luque, en 2002. Una incursión suya fue la antesala del 5-0 de Gavi.

Faena de trasteo

Relevo de Busquets, el vallecano cumplió el trámite. Nunca hubo rival para España sobre el campo y menos todavía cuando él compareció en el minuto 64, ya con 4-0. Dio continuidad a las maniobras, sin más historia.

El estreno mundialista de la factoría Williams

Unas horas antes de que su hermano mayor, Iñaki, debute con Ghana, Nico, con 20 años, apareció con España. Primero lo intentó con un pase al segundo palo buscando a Morata y, casi en el descuento, con otro que dejó muerto Keylor Navas para el sexto de la Roja.