Vicente del Bosque dejará el cargo de seleccionador el 31 de julio

Como ya tenía meditado desde hace meses, Vicente del Bosque, de 65 años, dejará el cargo de seleccionador el 31 de julio, fecha del vencimiento de su contrato con la Federación Española de Fútbol (FEF). Su posición es firme. “Llegásemos donde llegásemos en la Eurocopa, lo tenía muy decidido y ya hablado con el presidente, estaba súper pensado”, dijo ayer el técnico a este periódico. El presidente de la FEF, Ángel María Villar, conocía su deseo desde hace tiempo. Al término del encuentro frente a Italia, Villar le sugirió que se lo pensara de nuevo, en frío. Ambos no han llegado a tener aún un encuentro formal, pero la decisión está tomada.

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El dirigente sabía y sabe, antes y ahora, que Del Bosque no seguiría en el banquillo que ha ocupado los últimos ocho años, con un título mundial y otro europeo, un batacazo en Brasil y una decepción en Francia. La voluntad del todavía seleccionador es desligarse por completo de la federación, al menos de cualquier cargo remunerado. Otra cosa es que acepte participar en determinados actos sociales vinculados a la selección.

Durante la Eurocopa de Francia, el entrenador eludió intencionadamente comentar algo sobre su futuro a los jugadores. Quiso que nada les distrajera, que ninguno sintiera que era el final de una etapa. “Incluso, les dije que en septiembre teníamos nuevos compromisos, y dije teníamos porque siempre seré de la selección, faltaría más”, comentó Del Bosque. Será su sucesor quien deba afrontar la clasificación para el Mundial de Rusia de 2018, un tránsito nada sencillo en un grupo en el que figura Italia y en el que solo el primero tendrá plaza directa. Joaquín Caparrós, un entrenador de escuela diferente a la que ha dado sello a la Roja en la última década, es el favorito de Villar, a cuyo equipo del alma entrenó entre 2007 y 2011. Curiosamente, Caparrós ya fue seleccionador, de Andalucía, de 1998 a 2000.

Villar tendrá que informar a la Asamblea, a mediados de julio, de su planteamiento para el banquillo. Ocurre que en noviembre habrá elecciones a la presidencia federativa con lo que en caso de que cambiara el alto mando, el recién llegado se encontraría con un técnico contratado por su predecesor. Tampoco es descartable que Villar priorice como objetivo el gobierno de la UEFA.

A Del Bosque se le notó tranquilo. Decepcionado, lógicamente, pero consciente de que “era muy difícil repetir título”. “Eso sí, nos entusiasmamos todos con los dos primeros partidos, pero, pese a que habíamos hablado mucho sobre la peculiar forma de jugar de Italia, nos superaron”, agregó quien se irá del cargo con un registro muy relevante. De todos los seleccionadores que han cumplido al menos cien partidos con un mismo equipo, nadie en la historia tiene mayor porcentaje de victorias (77,7%). Le siguen el brasileño Zagallo (70,1%), el argentino Stábile (66,4%) y los alemanes Löw (66,1%) y Vogts (64,7%).