Rosberg se espabila pero tarde

Uno de los mundiales de Fórmula 1 más predecibles, planos y anodinos de los últimos tiempos terminó este domingo en Abu Dabi de una forma casi calcada a como comenzó hace nueve meses. Mercedes consiguió un doblete (el 12º) que parecía asegurado desde el viernes, Ferrari demostró que ha subido un escalón pero que todavía anda lejos de la marca de la estrella y el resto de escuderías fueron entremezclándose y enredándose en función de distintas variables. Sin embargo, no hay elemento que le dé una alegría a McLaren, perdida en tierra de nadie.

El último gran premio del año se lo llevó Nico Rosberg, tercera victoria consecutiva (la primera vez que lo logra) y sexta del curso para él, por delante de Lewis Hamilton y de Kimi Raikkonen. Carlos Sainz cruzó la meta el undécimo después de realizar una gran escalada en las primeras vueltas que (arrancó el décimo y se colocó el séptimo), antes de que el enésimo fallo de Toro Rosso en su primer cambio de neumáticos le hiciera perder tres segundos y dos puestos. Fernando Alonso completó un curso para echarse a llorar y concluyó el 17º, después de ser penalizado por llevarse puesto a Pastor Maldonado en la primera curva.

Raikkonen completó el podio, Sainz terminó el undécimo y Alonso, el 17º

Será casualidad , pero todo indica que el título que Hamilton se adjudicó en Austin le ha venido de perlas a su compañero de equipo. Aunque no lo admita abiertamente, resulta casi una obviedad que la corona ha hecho que el británico se relaje, circunstancia que Rosberg ha aprovechado para espabilarse y encadenar una muy buena racha de seis pole consecutivas. Lástima no haber pillado ese tren un par de meses antes. “Ya estoy pensando en el próximo Mundial, que para mí comenzó hace dos carreras”, reconocía el corredor de Wiesbaden la semana pasada en una entrevista con este periódico. Este triunfo fue el más incontestable de la temporada para él, sin ningún ‘pero’, dominando desde el sábado y sin ninguna grieta el domingo.

A la espera de los entrenamientos que se llevarán a cabo esta semana en este mismo escenario, toda la atención se centra ahora en los que comenzarán el próximo 22 de febrero en el circuito de Montmeló. Será allí donde comenzarán a desvelarse la multitud de incógnitas abiertas. Desde saber si Ferrari será al fin una amenaza real para Mercedes a si McLaren habrá sido capaz de encontrar la ruta para salir del agujero en el que se ha metido. Tres meses pasan volando.