Rosberg logra la ‘pole’ y Alonso saldrá quinto

La clasificación del Gran Premio de Hungría fue rica en sorpresas. No solo ya por los incidentes que dejaron fuera a Hamilton, Maldonado y Raikkonen en la primera tanda, sino también porque cuando se inició la tercera, la Q3, apareció la lluvia y varios pilotos perdieron el control de sus coches al final de la recta, cuando intentaban rodar con neumáticos de seco. El intento fue fallido: Rosberg se salió, Magnussen destrozó su coche en un aquaplanning, y Button les dijo a sus mecánicos que el asfalto estaba intratable. Sin embargo, cuando todo se calmó y la lluvia desapareció, las cosas volvieron a la normalidad. Es decir, Nico Rosberg logró el mejor tiempo y partirá primero, acompañado por su compatriota Sebastian Vettel en la primera línea, seguidos por Valtteri Bottas y Daniel Ricciardo en la segunda. Fernando Alonso partirá desde la quinta posición.

Fue la 10ª pole del alemán, que ha encontrado en Mercedes el coche de sus sueños. Hasta ahora, lleva seis primeros puestos en las 11 clasificaciones que ha disputado este año. Y se ha convertido en el único piloto que esta temporada logra encadenar tres pole positions consecutivas. Tras la de Hungría, Rosberg supera a Hamilton en dos poles en lo que llevamos de temporada. “Era difícil al principio de la Q3, con agua en la pista. Pero después todo fue mucho más fácil. El coche funcionó perfecto y logré una vuelta muy completa”. Para Vettel ésta es la tercera vez que se coloca en la primera línea este año. Fue también segundo en Malasia y en Gran Bretaña. Pero su obsesión es ahora superar a su compañero de equipo, Ricciardo, que esta vez saldrá cuarto, compartiendo línea con el Williams de Valtteri Bottas. Hasta ahora, el australiano le ha superado en seis clasificaciones.

Alonso, por su parte, no tuvo opciones de superar el quinto puesto que, al final, logró. “Probablemente, esta no es nuestra posición, porque nos hemos beneficiado del incidente de Hamilton y el de Magnussen. Pero intentaremos aprovecharlo”, señaló Alonso. “Mañana hay el 80% de posibilidades de lluvia en la carrera. Si llueve intentaremos coger alguna oportunidad. Si no, salimos en una buena posición y tenemos opciones de hacer un buen resultado”.

Las sorpresas comenzaron pronto en la clasificación de Hungría. El británico Lewis Hamilton tuvo que entrar a la línea del pit lane antes incluso de concluir su segunda vuelta y, por tanto, de marcar su primer tiempo. Un problema en la bomba de combustible le provocó un incendio espectacular en la parte trasera de su coche. “Tengo miedo”, dijo el piloto por radio. Y le contestaron que lo dejara todo a cero y saltara del coche. Las llamas arrasaron el vehículo y lo dejaron con daños difíciles de reparar. Tuvo que abandonar y partirá desde la 21ª posición. Solo delante del venezolano Pastor Maldonado, que prosiguió su mala racha y tuvo que abandonar su coche en el arcén, con problemas mecánicos en su primera vuelta. “No sabemos todavía qué ha podido ocurrir”, confesó un decepcionado Hamilton. “Lo estamos estudiando. Pero espero poder realizar una buena salida y remontar algunas posiciones”.

“Probablemente, esta no es nuestra posición, porque nos hemos beneficiado del incidente de Hamilton y el de Magnussen. Pero intentaremos aprovecharlo Fernando Alonso

La tercera sorpresa la produjo Ferrari. La escudería italiana se confió excesivamente con Kimi Raikkonen y, tras cinco vueltas, creyó que ya había marcado un tiempo suficiente como para asegurarse la clasificación para la segunda tanda. Sin embargo, fue un craso error. Raikkonen vio cómo Bianchi le arrebataba la 16ª posición y le dejaba fuera. Fue una nueva decepción para la escudería italiana, que no solo no encuentra la forma de lograr un coche competitivo, sino que además sigue fallando en cuestiones de estrategia.

La carrera plantea la cuestión de si Hamilton podrá volver a remontar tal como lo hizo en Alemania, pero no genera dudas sobre la superioridad de los Mercedes. Ahora las cosas se han igualado un poco, porque Red Bull está mucho más cerca de los monoplazas alemanes. Pero Ferrari no mejora. Sigue anclado en posiciones intermedias, sin dar ninguna opción a su mejor piloto, Alonso, que no opta ni siquiera al podio.