El Barça estimula a Messi
El argentino se convierte en el jugador mejor pagado del mundo antes de enfrentar al Atlético
El Barcelona se ha desvivido para mejorar el contrato de Messi antes del partido de hoy contra el Atlético. Aunque el club no quiere que el acuerdo se interprete como una medida de presión para el futbolista, su intención es que el 10 pueda competir liberado y sin excusas en un partido decisivo para la Liga. Necesita el equipo azulgrana más que nunca de la mejor versión de Messi.
El vínculo afectivo y económico se ha reforzado en un momento crucial para las dos partes: el jugador quería que sus ingresos se pusieran al día, después de saber que la contratación de Neymar había rondado los 100 millones de euros, y la directiva necesitaba pagar al 10 como corresponde al mejor futbolista del mundo y líder de un proyecto que va más allá del anunciado fin de ciclo y del resultado del Camp Nou. El adjetivo utilizado desde la entidad para definir el contrato es inequívoco: “adecuación”.
Messi, de 26 años, pasará de cobrar 13 millones de euros a cerca de 20 —hay partes de la negociación que lo sitúan en 17,5 millones— sin que se modifique ni la cláusula de rescisión (250 millones de euros) ni la duración del contrato (hasta 2018).
Las conversaciones, muy intensas ya con la presidencia de Sandro Rosell, han sido discontinuas y hubo más de un desencuentro, porque el club quería participar de una parte de los derechos de imagen del 10. A pesar de que no ha cedido, el argentino se habría mostrado dispuesto a ciertos acuerdos como el de renunciar al patrocinio de Turkish Airlines en beneficio de Qatar Airways, patrocinador del Barça. El acto formal de la firma de renovación, la séptima de Messi desde 2005, podría celebrarse antes del lunes, cuando el jugador tiene previsto viajar a Rosario, paso previo a incorporarse a la selección de Argentina para la disputa del Mundial, uno de las obsesiones de Messi.
El jugador, que mantiene los derechos de imagen, puede cobrar cerca de 20 millones
El 10 quiere refrendar su condición de número 1 en Brasil después de ser figura en el Barcelona. Ahora mismo ya es el extranjero con más partidos disputados con el club y el máximo goleador de la historia (354 en 424). Ha ganado cuatro ediciones del Balón de Oro, tres Botas de Oro, tres Pichichi y 21 títulos. Hoy aspira a sumar el 22 después que el club le haya estimulado con la actualización de sus ingresos y la hinchada le haya venerado en las últimas actuaciones en el Camp Nou en un año especialmente doloroso para el Barcelona y para el propio futbolista, falto de continuidad por las lesiones, denunciado por Hacienda, vinculado a través de terceros con supuestos grupos de narcotráfico y escaldado también por una agria discusión precisamente sobre sus contratos con el vicepresidente económico Xavier Faus. Una vez reforzados sus lazos con el Barça, Messi suspira por escapar esta tarde de la jaula en que le ha metido Simeone.
Messi le tenía tomada la medida al Atlético hasta la llegada del Cholo: 20 goles en 18 partidos. Los tripletes y dobletes se alternaban hasta que llegó Simeone. El promedio del 10 ha descendido de forma significativa: 2 goles en 8 partidos y ni uno en los últimos cinco, los disputados esta temporada. Ni como falso 9, ni caído a la banda derecha para enfrentar a Filipe Luis, ni quieto en el costado izquierdo, ha batido a Courtois en la Liga, la Champions y la Supercopa, torneo en el que falló un penalti en el Camp Nou.
Incontenible contra los rojiblancos (20 goles en 18 partidos) el ‘10’ se secó ante Simeone
No ha disminuido, en cambio, su media de 40 goles por temporada —constante los últimos cinco años—, y ha sido capital en triunfos como el del Bernabéu. El poder de intimidación de Messi se mantiene pese a que ha perdido explosividad, desequilibrio y cambio de ritmo, como si jugara a cámara lenta, sin la velocidad de ejecución que le ha distinguido. Incluso se ha incidido mucho en sus vómitos y su poca relación futbolística con Neymar. Nadie ha dado todavía con un diagnóstico. Piensa el club que la renovación puede ser una buena medicina para esta tarde y para el futuro.
“¿Cuándo el Barça no ha esperado a que Leo decidiera un partido?”, se preguntó ayer Martino. “Seguirá siendo el más decisivo en el Barça y en el fútbol mundial”, añadió el entrenador. “El nuevo contrato le debe dar tranquilidad a él y a la institución”. Una vez que Messi es ya el jugador mejor pagado, ahora se trata de que sea también capaz de marcar las diferencias en un partido definitivo para la Liga. Ahí está la jugada del Barça, y cuentan en la ciudad deportiva que Messi lleva dos días especialmente contento.
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