Brindis para Severiano

Una bolsa con palos de golf, vestida con una camiseta del Racing con el nombre de Severiano Ballesteros, fue utilizada por los jugadores del conjunto cántabro como homenaje al gran golfista fallecido, racinguista confeso de corazón y alma. Un ramo de flores sobre unos palos de golf cruzados en el punto de saque inicial, fue el tributo del Hércules al gran Seve. Pero una vez comenzado el encuentro, terminaron las consideraciones. El descenso estaba en juego, sobre todo para el Hércules, que le iba la vida en el partido. Y se le fue por errores propios y aciertos ajenos, con un iluminado Giovanni Dos Santos, que marcó dos goles que dejan virtualmente salvado al Racing. Un brindis para Severiano.

El Hércules tuvo un comienzo accidentado. A los cinco minutos, Thomert, entre sollozos, tuvo que abandonar el terreno de juego por lesión. El mal augurio para los alicantinos tuvo su continuación en el juego. El Racing, cubierto con cinco defensas, se defendía bien y atacaba con lucidez y persistencia. Y Antes del cuarto de hora conseguía adelantarse en el marcador después de un gran centro desde el costado derecho de Diop y un efectivo remate de cabeza de Dos Santos. Llegado en el mercado invernal, el delantero mexicano, avalado por sus cinco goles, se ha convertido en el jugador clave para la salvación del Racing.

No se resignó el Hércules a su destino trágico. Con buenas formas y mejor actitud, el equipo de Djukic persistió en su ataque. Y surgió también el infortunio para el Hércules, personificado en Sendoa, que envío por encima del travesaño un servicio perfecto de Rufete cuando se encontraba a dos metros de la línea de gol. Increíble. Como extraño resultaba presenciar un encuentro alegre, movido, sin ataduras. Obligado por las circunstancias, atacaba una y otra vez el Hércules, replicado de vez en cuando por un Racing más conservador de apariencia que de hechos.

Sendoa no tuvo que martirizarse mucho tiempo por su error al lograr empatar tras un disparo cruzado. Y el desánimo volvió a los alicantinos un minuto después; a Giovanni se le ocurrió inventar una vaselina que dejó clavado a Calatayud. Y pocos instantes más tarde, renació de nuevo el Hércules con un disparo de Tiago Gomes desviado por un defensa. Pero, de nuevo, regresó la amargura en el Rico Pérez, cuando Henrique marcara de cabeza ante la mala salida de Calatayud. Cuatro goles se dieron en apenas seis minutos. Una loa al ataque, despropósitos en las defensas.

Acometió con todo el Hércules en el segundo acto con Trezeguet en la punta junto a Valdez. La pareja de delanteros duró junta 15 minutos, los que tardó Pérez Lasa en mostrar una de sus expulsiones rigurosas al traducir un empujón de Valdez en agresión a Cisma (fingida por el defensa cántabro). Y se le acabaron las fuerzas al Hércules cuyo destino se encamina al descenso.

Hércules 2 - Racing 3