Alonso, a un suspiro de la gloria

Un par de vueltas le ha faltado al Gran Premio de Italia de Fórmula 1, habrá pensado el piloto español Fernando Alonso. Un par de vueltas le ha sobrado, imaginará por el contrario el colombiano Juan Pablo Montoya (McLaren), que ha visto como su MP4-20 claudicaba a un suspiro para el final de la carrera, con el español bufando en su nuca. A trancas y barrancas, con los neumáticos bajo mínimos y merced a su valiente decisión de no parar en boxes, Montoya ha mantenido su posición (más de quince segundos le ha recortado sin embargo Alonso) y ha ganado la carrera.

Alonso tampoco ha apurado al máximo; consciente de que le faltaba pista para lograrlo, aseguró el segundo puesto, de oro en cualquier caso porque su máximo rival en la clasificación general, el finlandés Kimi Raikkonen (McLaren) marchaba cuarto, tras superar un rosario de penalidades (comenzó undécimo, tras romper el motor en los entrenamientos, y hoy ha tenido problemas con los neumáticos). Entre los dos rivales ha entrado en meta el italiano Fisichella (Renault), que logra con esta tercera plaza su segundo podio de la temporada.

Tras esta carrera, Alonso se mantiene líder del Mundial con 103 puntos, frente a los 76 de Raikkonen. Quedan cuatro grandes premios: el de Bélgica (11 de septiembre, circuito de Spa-Francorchamps), Brasil (25 de septiembre, Interlagos), Japón (9 de octubre, Suzuka) y China (16 de octubre), Shangai). Quizá no hagan falta tantos para que el español se proclame campeón del Mundial, el primer español en hacerlo y el piloto más joven de la historia (tiene 24 años). Le basta con sumar cuatro puntos más que el finlandés en la próxima carrera (es decir, ganar y que Raikkonen quede tercero, por ejemplo). La clasificación de constructores está más apretada, sin embargo; Renault sigue líder, pero McLaren ha recortado hoy un punto y son ya sólo ocho los que separan ambas escuderías.