El Betis prosigue con su racha triunfal a costa del Levante

El Betis, uno de los conjuntos más en forma de la Liga, se ha llevado esta tarde los tres puntos del campo del Levante, el equipo revelación de Primera, al ganar por 1-2 un partido en el que los sevillanos han jugado de forma muy práctica, al controlar el juego en el centro del campo y demostrar una gran eficacia ofensiva, ante un rival muy sensibilizado con la actuación del trío arbitral.

Las protestas que, durante toda la semana, lanzó el Levante sobre el presunto trato desfavorable por parte del colectivo arbitral han dado pronto sus frutos. Sólo habían transcurrido cinco minutos cuando Sergio García ha acabado por los suelos dentro del área bética, enganchado por Rivas, en una acción muy protestada por los sevillanos. El árbitro se ha ido raudo hacia el punto de penalti.

Rivera ha puesto así en ventaja a su equipo, aunque es cierto que el Levante había salido con las pilas bien cargadas y, hasta la pena máxima, había disfrutado de dos ocasiones de gol, una de ellas diáfana, cuando Manchev lanzaba fuera ante la salida de Doblas al encarar el marco rival (minuto 1).

Ley del patadón en la segunda parte

El Betis ha asumido muchos riesgos al adelantar su defensa, pero la escasa presión de sus centrocampistas ha colmado de felicidad a los medios levantinistas, especialmente a Nacho y Rivera, que se han hinchado a lanzar balones a la espalda de la defensa bética para convertir el área de Doblas en un polvorín. El Levante tenía el partido donde le convenía, pero entonces han regresado los fantasmas de los arbitrajes desfavorables. En una falta desde el lateral lanzada por Assuncao, Manchev ha empujado a Edu, muy lejos de donde se encontraba el balón, y el árbitro ha vuelto a señalar el punto de penalti.

Ricardo Oliveira, en su transformación, ha equilibrado el partido no sólo en el marcador pues, a partir de entonces, el Betis ha ordenado su defensa y el Levante ha encontrado muchos problemas para crear juego mientras sus aficionados, muy enfadados, se ensañaban con reproches al trío arbitral. Lo que había sido un choque trepidante en la primera mitad se ha convertido un partido muy trabado en la reanudación. Ha imperado la ley del patadón y el poco peligro que han corrido ambos metas ha llegado de jugadas embarulladas, como un remate de Manchev que ha salvado Doblas (minuto 57), o en despistes defensivos, como la internada de Joaquín que ha evitado Mora (minuto 59).

Sólo el Levante ha intentado poner orden en aquel caos. A la manera tradicional, es decir, abriendo el juego por las bandas, pero Ettien, que ha encontrado una autopista en la suya, no tenía su día y sus centros, muy poco calibrados, acababan todos en el otro extremo del campo sin encontrar rematador. El empeño del Levante ha convirtido el tramo final del encuentro en un festival de ocasiones para los valencianos, ante un Betis muy conservador, pero el que ha sacado provecho ha sido el Betis que, en su tercer disparo a puerta en todo el partido, se ha llevado los tres puntos gracias a un disparo de Edu (minuto 82).