‘Girasoles silvestres’: y ella siempre andaba buscando amor

La nueva película de Jaime Rosales habla de una mujer joven, de clase media baja, con críos, en permanente incertidumbre, ‘rarita’ a ratos, buscándose la vida como puede

Desde la izquierda, Oriol Pla, Anna Castillo y Carolina Yuste, en 'Girasoles silvestres'.

El cine de Jaime Rosales llevó durante mucho tiempo el prestigioso sello del experimentalismo, de no buscar perspectivas comerciales, de contar historias con un estilo narrativo original, pero en mi analfabeto caso, complicado de seguir, de introducirme en lo que pretendía contar. Y, a veces, ese hermetismo con legítimas pretensiones de arte me ponía de los nervios, me irritaba. Experimenté esas ingratas sensaciones con Tiro en la cabeza y Sueño y silencio. Me intrigaron Las horas del día y ...

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El cine de Jaime Rosales llevó durante mucho tiempo el prestigioso sello del experimentalismo, de no buscar perspectivas comerciales, de contar historias con un estilo narrativo original, pero en mi analfabeto caso, complicado de seguir, de introducirme en lo que pretendía contar. Y, a veces, ese hermetismo con legítimas pretensiones de arte me ponía de los nervios, me irritaba. Experimenté esas ingratas sensaciones con Tiro en la cabeza y Sueño y silencio. Me intrigaron Las horas del día y La soledad.

Este cine recibía la bendición de los festivales, incluido Cannes, y los elogios generalizados de la crítica. Pero solo me sentí seducido con su película Hermosa juventud, retrato penetrante y veraz del acorralamiento a múltiples niveles, incluido algo tan asfixiante como la falta de trabajo, de una pareja muy joven, padres de una niñita. Todo me sonaba a auténtico en esta desoladora historia sobre la frustración cotidiana, me implicaba en la rotura permanente de sus sueños, les compadecía. También me provocó inquietud Petra, incluida la aparición de uno de los villanos más sofisticados y crueles que he visto en el cine español.

Ahora Girasoles silvestres habla de una mujer joven, de clase media baja, con críos, en permanente incertidumbre, rarita a ratos, buscándose la vida como puede y de sus relaciones sentimentales con un macarra neurótico y violento, su exmarido, un legionario incapaz de asumir responsabilidades familiares, y con un antiguo colega del barrio, alguien en posesión de sensatez y madurez mental. Rosales habla del posibilismo cuando la vida está muy cruda, de búsqueda, encuentros, reencuentros y roturas, del miedo y la incertidumbre como acompañantes fijos, de ilusiones rotas que intentan renovarse, de la obligatoriedad de moverse cuando la depresión invita a la parálisis, de la necesidad de encontrar tu lugar en el mundo.

Rosales, al igual que en Hermosa juventud, logra hacer creíbles a los personajes, sus sensaciones, sus mosqueos, sus actitudes, su lenguaje. Nada parece impostado. Y si me los creo, me interesa lo que les va ocurriendo. Este director, paradójicamente, dispone de una mirada y un oído muy atentos para retratar universos que bordean la pobreza, amenazados permanentemente por el desequilibrio emocional, gente que intenta sobrevivir. Y me gusta mucho la interpretación de Anna Castillo. Tiene personalidad, transmite matices.

Y hablando de actores, no se pierdan la humanidad, la naturalidad, el sentido de la justicia, el miedo, la tenacidad que aporta el inmenso Ricardo Darín al personaje del fiscal Julio Strassera en Argentina, 1985. Darín otorga credibilidad, magnetismo, complejidad y alma a todo tipo de personajes. Verle y escucharle siempre es un espectáculo, su presencia, independientemente de la calidad de la película, justifica el precio de la entrada. Y creo que es la primera vez que he observado en la pantalla a una actriz muy joven llamada Valeria Sorolla y a Telmo Irureta, un señor con parálisis cerebral, inteligente, magnético y conmovedor. Son los protagonistas de La consagración de la primavera, una película dura, perturbadora, turbia en el mejor sentido. La dirige Fernando Franco. Yo no conectaba con su cine, pero tengo incrustada en la memoria La consagración de la primavera, esa historia de sexo comprado e imposible final feliz entre una cría que desprende misterio y un hombre enclaustrado en su habitación y en una silla de ruedas por su terrible enfermedad. Habla del deseo, de la necesidad de calor humano en las peores circunstancias, de la extraña y mágica comunicación entre dos personajes que me hipnotizan.

GIRASOLES SILVESTRES

Dirección: Jaime Rosales.

Intérpretes: Anna Castillo, Oriol Pla, Carolina Yuste, Manolo Solo, Lluís Marqués.

Género: drama. España, 2022.

Duración: 107 minutos.

Estreno: 14 de octubre.


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