Policía sin fronteras y hombre sin rostro

A un mundo globalizado le corresponde un crimen globalizado. Una unidad policial de élite se ocupa de controlar la seguridad internacional europea e investigar casos que saltan las fronteras. Ese grupo (ficticio) es el protagonista de Crossing Lines, coproducción europea y estadounidense con tres temporadas ya emitidas que el canal DMAX (nuevo nombre de Discovery Max) emite ahora en abierto los martes (22.30). Esa especie de FBI internacional está compuesto por agentes de diferentes nacionalidades, como un italiano especialista en la mafia, una analista francesa, un experto en armas y tácticas de Irlanda del Norte, un expolicía estadounidense con problemas de adicción a la morfina o un especialista en tecnología alemán.

El actor Tom Wlaschiha (Dohna, Alemania, 1973), más conocido por ser el imperturbable Jaqen H'ghar de Juego de tronos, interpreta a Sebastian Berger, el experto en ordenadores del grupo. "Pero en la vida real no tengo ni idea de cómo funciona un ordenador. Sé cómo encender el mío y sé apagarlo. Pero lo que ocurre entre medias es un misterio para mí", cuenta entre risas en conversación telefónica con EL PAÍS. "A veces había gente del equipo que me explicaba lo que significaban las cosas que tenía que decir y hacer. Era muy interesante, pero no me pidas que lo repita", remata. No parece sencillo memorizar diálogos que casi no entiendes, y más si el idioma (la serie se grabó en inglés) no es tu lengua materna. "Hacer que suene normal y correcto es complicado. Normalmente no tengo problemas para aprender mis diálogos, pero en Crossing Lines tenía que hacer un esfuerzo especial".

Una de las cosas que más divierte a Wlaschiha de su participación en esta coproducción era su aspecto internacional. La serie se ha grabado en lugares como Praga —donde tiene la base y donde se encontraban los platós centrales—, París, Niza, Bulgaria, Croacia... "No estábamos un día o dos, sino que estábamos en muchos sitios durante periodos de tiempo largos. Es genial porque así llegas a conocer bien la vida de cada lugar". Para Wlaschiha, la serie refleja una realidad: "el mundo se está haciendo cada vez más pequeño, cada ciudad tiene gente de cientos de países diferentes. Y el crimen se está volviendo más internacional".

En los últimos años, Wlaschiha ha compatibilizado su participación en Crossing Lines con el rodaje de Juego de tronos, dos experiencias muy diferentes entre sí. "Crossing Lines fue mucho más intenso, porque grababa todos los días. En Juego de tronos hay tantos personajes y tantas tramas... Es una producción bestial, pero como actor no llegas a conocer a tus compañeros tan bien", compara. Reconoce que no había leído los libros de George R.R. Martin en los que está basada la superproducción de HBO. "No soy un gran fan de la fantasía porque creo que la vida ya es suficientemente interesante. Pero cuando me uní al elenco, leí los dos primeros libros y me enganché".

Ser parte de una serie como Juego de tronos supone ciertas dificultades para sus actores. Guardar silencio sobre lo que va a ocurrir es una de ellas. "Y la presión de que tanta gente la siga. Quieres hacerlo perfecto. Lo más complicado de mi personaje probablemente es su forma de hablar. Tiene una pronunciación peculiar y siempre habla en tercera persona. Tuve que encontrar la forma de hacer que sonara más o menos natural, porque quería que el personaje estuviera vivo y no fuera un friki. Fui afortunado de tener un gran personaje", cuenta Wlaschiha, hablando en pasado de Jaqen H'ghar, el Hombre sin Rostro que entrena a Arya Stark durante su estancia en la Casa de Blanco y Negro.

La entrevista tiene lugar justo cuando el rodaje de la séptima temporada de Juego de tronos está a punto de arrancar. La pregunta es obligada: ¿estará en la nueva temporada? "Un hombre no sabe", contesta Wlaschiha imitando la forma de hablar y el acento de su personaje en la serie. Risas a los dos lados del teléfono. Que cada uno saque sus conclusiones.