Los trabajadores ganan el pulso a RTVV con un apagón de la ‘cremà’

Ràdio Televisió Valenciana (RTVV) lleva retransmitiendo con un amplio despliegue la cremà de Fallas desde hace 23 años. El lunes por la noche, sin embargo, los telespectadores que quisieron disfrutar del final de estas fiestas tuvieron que probar suerte en otro canal. Porque, por primera vez desde su nacimiento, la cadena pública tuvo que anular la retransmisión del final de las fiestas. La dirección avisó en un comunicado que se debía a la “falta de acuerdo con el comité”. Este había convocado dos huelgas parciales para la mascletà del domingo y para las horas que dura la quema de monumentos por el expediente de regulación de empleo (ERE) que el ente público tiene programado y que puede afectar hasta a dos tercios de la plantilla.

“Lo achacamos exclusivamente a la responsabilidad de la empresa”, recordaba ayer Vicent Mifsud, miembro del comité de empresa de RTVV. “La dirección tuvo toda la semana pasada para reconsiderar la huelga”, anunció Mifsud, “pero no hicieron ningún esfuerzo”. “No nos quedó más remedio que acatar nuestro único instrumento de protesta. Una opción que no es buena ni para la empresa ni para los trabajadores ni para el público”, resumió el trabajador.

“La dirección tuvo toda la semana pasada para reconsiderar la huelga"

La dirección pidió disculpas por una situación que calificó de “injusta y desproporcionada” y que supone la privación de “uno de los momentos más emotivos y arraigados de la cultura de la Comunidad Valenciana”. También expresó que su voluntad había sido, “en todo momento”, conciliar “tanto el derecho de huelga de sus empleados como el derecho a la información de un acontecimiento que alcanza relevancia internacional”.

La huelga de trabajadores de RTVV, que se llevó a cabo entre las 22.00 y las 02.00 de la madrugada, dejó a la programación de la cadena pública sin la retransmisión del final de las fiestas. “Es el primer movimiento que tenemos que hacer porque es una empresa caciquil”, comentaba ayer María José Armada, una trabajadora con 20 años de antigüedad que se manifestaba frente al balcón municipal. “Queremos que se reúnan con nosotros para elaborar un plan de viabilidad y poder tener una televisión pública, en valenciano y de calidad”, sostenía la trabajadora ante la futura regulación de la entidad. El comité de empresa, que aún desconoce la magnitud de esta restructuración, alegó un desentendimiento total por parte de la empresa: “Estaba en sus manos parar la huelga”, indicó Vicent Mifsud, “pero no han tenido ningún gesto”.

El domingo, el canal público pudo emitir la mascletà a pesar de contar con servicios mínimos, pero anoche la escasez de medios hizo imposible mostrar la quema de los monumentos: “Solo contamos con los equipos habituales para la información del mediodía”, aseguraron fuentes de la empresa.

La empresa considera "desproporcionada e injusta" la protesta

Joseba Larrea, empleado de la cadena autonómica desde su nacimiento, se quejaba así: “No nos han comunicado nada de lo que van a hacernos. Dicen que se van a suprimir 1.000 o 1.300 puestos de trabajo pero yo creo que nos van a echar a los 1.800”. “Habría que preguntarse”, continuó el trabajador, “por qué han tenido que llamar a una empresa externa para comprobar el estado de la empresa. Son 125.000 euros gastados para tirarnos a la calle”, protestaba.

La cremà de anoche fundió los más de 760 monumentos grandes e infantiles de la ciudad de Valencia y de las poblaciones situadas en el área metropolitana de la capital integradas en la Junta Central Fallera de Valencia. Con un dispositivo de alrededor de 400 bomberos y 100 camiones preparados, la quema de fallas puso el punto y aparte a las fiestas de 2012 y cerró en la noche de Sant Josep con el programa de este año.

Miles de valencianos y de turistas aguardaban desde las diez de la noche, hora en que se prendía la primera falla infantil, a que el equipo de bomberos fuera acabando con los montajes instalados en las calles. A las 00.30 estaba planificada la quema de la escultura de Nou Campanar, titulada Con lo que hemos sido y ganadora de la sección Especial. La última en arder era, como es tradición, la plantada en la plaza del Ayuntamiento, titulada Pensat i fet.