
Los ‘guardianes’ del cementerio de Punchana: “Cuando tienes mono, haces todo por dinero”
Un grupo de personas con adicciones ha encontrado refugio y empleo en este camposanto de la Amazonía peruana
Un grupo de personas con adicciones ha encontrado refugio y empleo en este camposanto de la Amazonía peruana
José Antonio Ballesteros es el autor de las fotografías publicadas esta semana en la sección de Opinión
Gonzalo Durand Zamalloa tiene 58 años y es profesor en Markuray, una comunidad indígena de Perú. Los inicios para él no fueron fáciles, pero su vocación ha podido con todos los obstáculos que ha encontrado a su paso. Y estos han sido muchos. Una historia inspiradora