Reforma a la salud en Colombia: claves para entender la iniciativa de Gustavo Petro que avanza en el Congreso

El presidente Gustavo Petro no quiso esperar. Fue a mediados de febrero cuando presentó en la Casa de Nariño su proyecto de ley que reforma el sistema de salud. La lista de artículos se centraba en cambiar la estructura de acceso: eliminar el carné de afiliación y hacer de la salud un derecho universal. La propuesta fue una de las banderas que el ahora presidente Petro levantó incontables veces durante campaña electoral.

La reforma a la salud tiene el objetivo de recuperar el control de los recursos públicos en dicho rubro. Enfatiza la importancia de garantizar la atención primaria en salud para todos los colombianos. La propuesta también contempla una la mejora laboral para los trabajadores del sector. La prevención de enfermedades también es una de las iniciativas destacadas en la reforma compuesta originalmente de 152 artículos. Enseguida se enlistan los objetivos primordiales de la reforma a la salud en Colombia.

Reducción de las brechas en salud

La reforma de ley aprobada busca acortar distancias entre las brechas en la salud, especialmente las que se dan entre las grandes ciudades y las zonas rurales y poco pobladas. Los Centros de Atención Primaria del sistema de salud colombiano serán los encargados de dar cobertura universal a la población, cada uno encargado de 25.000 personas, seleccionadas por la cercanía de su residencia o lugar de trabajo.

Sistema de prevención de enfermedades

El monitoreo a tiempo y la prevención de enfermedades es otro estandarte de la reforma. La intención es llevar a cabo programas de atención entre la población para el diagnóstico oportuno de padecimientos. En este punto se incluye a la salud mental.

Centralización de los pagos

El nuevo Gobierno quiere que la reforma sea sostenible en el tiempo. La reforma al sistema de salud prevé que el presupuesto continúe siendo financiado a través del Estado. La novedad en la legislación es la desaparición de las Entidades Promotoras de Salud que funcionan hasta ahora como intermediarios entre los prestadores de servicio y los ciudadanos, al ser aseguradoras de la salud que reciben un pago por afiliado y deben ofrecer todos los servicios que éste requiera, dentro de ciertas reglas y topes. La idea de la propuesta es fortalecer a la Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud (ADRES) y operar desde ahí un sistema de pagos centralizado.

Calificación y seguimiento técnico de instancias internacionales

La propuesta se sostiene en avales internacionales como la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud. La intención es que la nueva la reforma esté sustentada y supervisada por dichas instancias.

Prestación pública y privada

La nueva ley busca que los servicios de salud puedan ser prestado por entidades privadas, públicas y mixtas. Eso significa que podrán seguir existiendo clínicas, hospitales o laboratorios privados. Propone que el valor de los servicios que les pague ADRES no dependa de la competencia sino de tablas de valores definidas por el Ministerio de Salud.

Calidad de vida para los trabajadores de la salud

La reforma no ha dejado fuera a quienes sostienen al sector. Los trabajadores se verían beneficiados con mejoras salariales y autonomía médica. Además de los incrementos, las condiciones laborales estarían respaldadas por mayor formación, educación y actualización continua para el personal. Se dará prioridad a los trabajadores que laboran fuera de las urbes.

Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS sobre Colombia y reciba todas las claves informativas de la actualidad del país.