Muere el “caminante por la paz”, Gustavo Moncayo
El ‘profe’ Moncayo falleció este martes tras una batalla contra un cáncer de hígado
El “caminante por la paz”, Gustavo Moncayo, ha fallecido, este martes, tras perder la lucha contra un cáncer terminal de hígado. El antiguo profesor de geografía en su pueblo nariñense, Sandoná. Moncayo habría regresado este año a Colombia de Canadá, donde vivía, para combatir su enfermedad. El profe fue conocido por su lucha por la libertad de su hijo Pablo Emilio Moncayo, un cabo del Ejército secuestrado por la entonces guerrilla de las FARC en 1997. En el 2007 caminó los más de 1.000 kilómetros que separan a Sandoná de Bogotá con cadenas en las manos y acompañado de sus hijas Yury Tatiana y Carol. Fueron 45 días de esfuerzo que buscaban llamar la atención de las autoridades, la ciudadanía y las FARC para exigir la liberación de su hijo. En su paso por ciudades como Cali, Pereira, Armenia e Ibagué fue logrando ese cometido y lo llevó a la memoria colectiva de los colombianos.
Pero fue su llegada a Bogotá, rodeado por cámaras de televisión y voces de aliento, lo que lo volvió una figura pública. Monyaco terminó en un recordado encuentro con el entonces presidente, Álvaro Uribe Vélez. Uribe, quien se había reelegido gracias a la popularidad de su política de acabar a la guerrilla a sangre y fuego, esperó al profe en la céntrica Plaza de Bolívar. Frente a las cámaras, desde una tarima, el poderoso y popular presidente lo encaró y le dijo que no: que no negociaría la liberación de su hijo, porque eso iría contra su estrategia para acabar con las FARC, la guerrilla que había asesinado a su papá, según ha contado una y otra vez.
El encuentro duró cuatro horas y terminó con Moncayo derramando lágrimas y montando una carpa en la Plaza. Luego se dedicó a visitar países europeos en busca de voces que apoyaran su llamado a una liberación o un canje humanitario de guerrilleros presos por militares y policías secuestrados. Llegó a tener encuentros con el entonces presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, y con el Papa Benedicto XVI. También promovió una marcha desde Bogotá hasta Caracas para reunirse con el presidente venezolano, Hugo Chávez.
Tres años más tarde, días después de que el profe fracasó en su candidatura el Congreso por el Polo Democrático y meses antes de que Uribe dejara el poder, en marzo del 2010 las FARC liberaron a Pablo Emilio Moncayo tras 12 años de cautiverio en la selva gracias a una negociación que gestionó la hoy senadora, Piedad Córdoba. Moncayo le agradeció también a Chávez, al presidente de Brasil, Lula da Silva. Nada dijo de Uribe, y no quiso pronunciarse sobre las FARC.
Desde entonces, el hombre conocido como El profesor Moncayo o El profe Moncayo, se dedicó a apoyar los procesos de paz y la liberación de cientos de secuestrados. Se mudó a Canadá con su familia debido a amenazas y había regresado a Pasto el pasado octubre para realizarse un tratamiento contra un cáncer de hígado. Su hija Yuri le dijo a Noticias Uno que esperaban una reparación económica de parte de las FARC. “Tienen la capacidad y posibilidad de hacerlo, y lo estamos exigiendo porque necesitamos un trasplante para mi padre que está en peligro de muerte”.
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