El testaferro de González: “Le están pegando al otro en mi trasero, y lo tengo colorado...”

En una ocasión, Edmundo, viéndose cazado, llega incluso a meditar delatar a Ignacio González. Se lo contó a María Fernanda Richmond, ahora también encarcelada. Es la exdirectora financiera del Canal de Isabel II y otrora persona de la máxima confianza del expresidente de Madrid.

El abogado Carlos Rodríguez a Edmundo Rodríguez: "Ignacio González no tiene defensa estética posible”

Tras repasar ambos “el injustificado” rumbo económico del que hace gala el matrimonio Ignacio González y Lourdes Cavero tras dejar el Gobierno regional, Edmundo comenta a Richmond que al día siguiente tiene una cita con una persona que no identifica y con la que se había visto “tres o cuatro meses antes”. Edmundo explica a Richmond: “El tipo me dijo: yo sé que tú estás muy dolido por tu salida de Inassa [fue destituido el pasado verano de la empresa que es la principal filial del Canal en Latinoamérica]… Mis amigos y yo podríamos ayudarte mucho (…) Si tuvieras algo que contarnos de Esperanza o de Nacho, algo eh… especial (…) Yo no quiero decir[les] ni un no ni un sí rotundo… quiero saber algo más y mañana los voy a ver otra vez. Es una operación complicada (…)”.

-Edmundo Rodríguez: “¿Esto no sé si te lo había contado?".

-María Fernanda Richmond: “No”.

-Edmundo: ”Si tuvieras algo que contarnos de Esperanza o de Nacho, algo eh… especial”.

-María Fernanda Richmond: “¡Jugoso!”

-Edmundo: “Jugoso. Es un tema jodido, claro. Una operación complicada".

-María Fernanda Richmond: "Sí, eso es caminar al borde del precipicio”.

Edmundo muestra miedo a que le graben: “Tengo muchos enemigos”.

En la misma grabación, a la que ha tenido acceso EL PAÍS, ambos muestran su estupor por el alto ritmo de vida del matrimonio Ignacio González y Lourdes Cavero. “[Ella] Tiene cero trabajo”, remarca Richmond. Edmundo (“es que Lourdes también es la leche”, dice) da por hecho que tienen “dinerillo b”, dato del que se hace eco el juez Velasco en un auto en el que hace un resumen de los hechos delictivos que atribuye a los principales encausados.

“(…) Es que no te imaginas hasta qué punto estos cabrones se lo han tomao"

En otra conversación telefónica fechada el 26 de octubre del año pasado entre Edmundo, consejero delegado de La Razón, y un ejecutivo del periódico, el primero, expresidente de Inassa  se queja de la presión que sufre desde que el Gobierno de Cristina Cifuentes lo apartó del cargo el pasado verano tras aflorar graves irregularidades en una firma del Canal en Brasil, Emissao. En la compra de esta sociedad, en 2013, el juez Velasco advierte un desvío de fondos públicos del Canal que ronda los 25 millones de euros que supuestamente se han repartido Edmundo e Ignacio González.

Edmundo muestra así su inquietud, refiriéndose a Ignacio González: “(…) Es que no te imaginas hasta qué punto estos cabrones se lo han tomado (…) esto solamente se puede entender, como odio mortal a IG (…) a IG que le odian (…), le odian, le odian a muerte, vale pues eso lo entiendo hasta cierto punto, ¿no? (…)”.

20 días antes, Edmundo tiene otra conversación en tono similar con una empresaria madrileña, en la que también se queja de las presiones. “(…) La mitad de mis males vienen de un seguimiento que no era para mí (…) ahora el triángulo perfecto es el de las bolsas, que paso por Hong Kong y, y, y antes había estado en Bahamas”. Alude a cuando Ignacio González y él fueron grabados por unos detectives, a fines de agosto de 2013, portando unas enormes bolsas a las puerta de un hotel de Cartagena de Indias (Colombia). González dijo tiempo después, al hacerse pública la grabación en la Cadena SER, que contenían toallas.

El 12 de diciembre pasado habló de nuevo con la citada empresaria. Edmundo le comenta: “Llevo ocho meses con, con una historia que no da de sí….”. La empresaria le interrumpe: “(…) Y sobre todo llevas ocho meses por culpa de otros, o sea, que eso es lo más gracioso… pero a quien quieren hincar el diente, ahí está…”. Edmundo asiente ante esa afirmación.

En otro de los diálogos interceptados por la Guardia Civil, Edmundo conversa con el abogado Carlos Rodríguez en relación con lo que se ha hablado sobre gestión en Inassa durante una comisión de investigación sobre el Canal de Isabel II celebrada el pasado verano en la Asamblea de Madrid. En la citada sesión se le atribuyó haber blanqueado capitales en la compra de la brasileña Emissao. Y asegura que le dan ganas de "querellarse". Pero Carlos Rodríguez se lo desaconseja. “Toma ejemplo de Ignacio, que no reacciona ante manifestaciones negativas contra él”.

-Edmundo Rodríguez: “Ya me están pegando”.

-Carlos Rodríguez: “Claro, y ahí no tienes defensa, ahí no tienes defensa.

-Edmundo: No tengo defensa, pero no es punible.

-Carlos Rodríguez: No tienes defensa desde el punto de vista moral.

-Edmundo: “Estético”.

-Carlos Rodríguez: “Moral”

-Edmundo: “Estético… vale. Bien, mire usted y ahora cuál es el siguiente…

-Carlos Rodríguez: “No, no no, no, sí, y lo tengo hablado, lo tenía hablado con Ignacio González

-Edmundo: Estaba absolutamente... [de esta afirmación, y del contexto de otras, la UCO concluye que Ignacio González estaba “absolutamente” al tanto de la compra de una firma en Brasil, Emissao, en 2013., por un precio seis veces su valor. Casi 20 de los 25 millones desviados han sido localizados por el juez en Suiza.

-Carlos Rodríguez: “No, no, no, que eso a Ignacio igual se la pela que lo digas. Lo que es presente es que a Ignacio González le pasa lo mismo, mucho peor que a ti. Ignacio González no tiene defensa estética posible”.

-Edmundo: Vale

-Carlos Rodríguez: “Pero jurídicamente no le trincan, ¿qué hace? Pues estar callado.

El pasado 20 de diciembre, Edmundo charló, en el restarante La Paloma, de Madrid, con Ignasi Maestre, otro de los 57 investigados por el juez Velasco en Lezo.

Este fue el diálogo:

-Edmundo: "(…) Mientras que González siga vivo, yo voy a estar jodido"

-Ignasi Maestre: ”Ese es el problema, que tú estás vinculado a González"

-Edmundo: Ignasi, y no sé por qué, no sé si me explico, o sea…"

-Ignasi Maestre: “Bueno, por qué…"

-Edmundo: “Por qué yo sí y no el gerente del Canal anterior o cualquiera de sus consejeros, joer porque me ha tocado la china a mí, es que es..

-Ignasi Maestre: “(…) ¡Bueno ya está bien!, yo formo parte del Consejo de administración, tengo un despacho allí, a vosotros se os ha regalado unas acciones que no habéis pagado, que no sé si las pagaréis, y además, coño, apesto, que no eh…ya está bien, ¿no? No, no y no. Cuando conoces a la gente es en circunstancias así, ¿no?

-Edmundo: “Sí hombre, el 90% de mis males provienen de que yo no salí corriendo de Ignacio González como si fuera un apestado; es un señor que conmigo se ha portado bien”.

Edmundo Rodríguez detalla también las presiones que está sufriendo al saberse investigado a “un tal Ángel”, según la investigación: “Siguen dándome, macho, siguen dándome. Estos son intentos de patadas en mi culo al otro, ¿no? El otro sonríe cada vez que me pegan a mí una patada en el culo, ¿entiendes?”

En otra conversación con la periodista Isabel Gallego, exjefa de prensa de González en la Comunidad, le indica que le “están pegando al otro en mi trasero, y”, añade, “lo tengo colorado de recoger patadas”. Isabel González agrega: “(…) Es que es una cosa… bueno, es que es esquizofrénica, o sea que es una cosa que hasta que no le vean, no sé, machacado, que ya le han machacado… no sé que quieren hacer con él”.

Hay una conversación entre Clarisa Guerra, secretaria de Ignacio González, y una ex trabajadora del despacho de Edmundo Rodríguez, en la que hablan del estado anímico de Ignacio González.  A Edmundo lo ven “agobiadillo por el tema penal”. “Va tocado porque ya no es el magnífico segundo de él, del jefazo…”. La secretaria de Edmundo apostilla sobre Ignacio González: “(…) Habiéndose creído el number one, es una caída en picado”.

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