Una bomba casera fabricada siguiendo instrucciones de Internet
El detenido por el ataque a la sede del PP llevaba varios días planeándolo en su casa
Daniel Pérez Berlanga, de 37 años, llevaba días planeando un atentado en su casa de Bronchales (Teruel) contra quienes él consideraba los responsables de su desgracia, el Gobierno. Desde mayo estaba en el paro, porque un ERE en la empresa de aglomerados de madera para la que trabajaba en el pueblo (UTISA) le dejó en la calle.
Según fuentes cercanas a la investigación, él, en tratamiento por esquizofrenia y consumo de drogas, se encerró en su pisito, al lado de la casa de sus padres, y en la intimidad de su hogar se puso a mirar cómo hacer una bomba por Internet. Compró unas bolitas de nitrato amónico, que no son muy difíciles de conseguir porque se usan como fertilizantes y montó un explosivo con dos botellas de butano (de las naranjas) y fabricó un detonador rudimentario a base de cabezas de cerillas.
Anoche se la pasó de copas por los bares del pueblo. Ya, de madrugada, se metió en el coche con su poderosa arma.“Si hubiese detonado habría sido muy peligroso y causado importantes daños”, asegura un TEDAX de la Policía Nacional. Se estrelló esta mañana contra la sede del Partido Popular en Génova. Ahora, detenido en una comisaría de Madrid, podría enfrentarse a un delito de terrorismo.
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