El PP expulsará a los militantes que exhiban símbolos fascistas

La dirección del PP expulsará automáticamente a los militantes que exhiban símbolos fascistas, según explicó a este periódico la presidenta de Nuevas Generaciones, Beatriz Jurado. La orden de la sede de Génova a la organización juvenil ha llegado después de que se hayan difundido a través de las redes sociales durante el verano imágenes de miembros de Nuevas Generaciones con banderas preconstitucionales y, en algunos casos, con el brazo en posición de saludo fascista.

En todos esos casos, siempre según esa versión, la dirección del partido ha actuado primero para verificar la veracidad de las imágenes. Por ejemplo, asegura que en algunos casos se determinó que en los perfiles de Twitter o de Facebook de algunos de los implicados estos se identificaban como militantes sin serlo.

Tras esa gestión, el PP asegura que ha acreditado seis casos y que su intención es que la investigación termine en expulsión, una vez que se siga el cauce legal establecido. Cuatro casos están en la Comunidad Valenciana y otros dos en Castilla-La Mancha. De todos se ha informado a las direcciones provinciales y regionales.

En las próximas semanas, según Jurado, el Comité Nacional de Derechos y Garantías abrirá expediente para proceder a la expulsión de los implicados. La ley de partidos exige un proceso con garantías, que incluye escuchar al afectado. De hecho, uno de ellos, de Castilla-La Mancha, ha presentado una denuncia ante la policía por el presunto pirateo de su cuenta en una red social en la que se publicaron mensajes fascistas. El expediente determinará si es cierto o no.

La base para la expulsión serán los artículos 6 y 10 de los estatutos del PP, que prevén esa sanción para quienes provoquen un quebranto a la imagen del partido o contravengan el ordenamiento jurídico. En este caso, la dirección del PP asegura que se contraviene la Constitución con la exhibición de banderas con el águila franquista o con el saludo fascista.

La presidenta de Nuevas Generaciones expresó su rechazo a este tipo de manifestaciones y afirma que esa es la posición de su partido. Así lo expresó también ayer el vicesecretario de Estudios y Programas del PP, Esteban González Pons, al asegurar que “quienes cometen esa estupidez [fotografiarse con gestos fascistas] no merecen pertenecer al PP. Me parece impresentable que alguien presuma de nazi o que haga mofa con esos símbolos. Creo que no saben lo que hacen”.

No obstante, sobre si los jóvenes pillados con gesto fascista deberían ser apartados de sus cargos (en Valencia hay dos que son concejales), aseguró: “Creo que no debo condicionar la resolución de los expedientes abiertos por el Comité de Derechos y Garantías de Nuevas Generaciones”.

Esa es la posición que pretende mostrar la dirección nacional del PP, pero ayer mismo el portavoz adjunto del partido en el Congreso, Rafael Hernando, agitó las redes sociales con unas declaraciones en el programa de televisión Las mañanas de Cuatro, en las que aseguraba que la República provocó un millón de muertos.

Primero tachó de “lamentables y deplorables” las actitudes de miembros de Nuevas Generaciones de su partido que han aparecido en fotografías con el brazo en alto o junto a la bandera franquista. Si estuviera en su mano, aseguró, los expulsaría.

Luego equiparó ese gesto con la exhibición de la bandera tricolor republicana y pidió que se expulse del PSOE a los que la muestren por ser también inconstitucional. Oficialmente, no fue desautorizado por la dirección del partido, pero González Pons lanzó en Valencia un mensaje totalmente contrario. Sobre la equiparación que han realizado distintos cargos populares de la bandera republicana y la bandera franquista, González Pons se refirió al uso en París de la bandera republicana para rendir homenaje a los españoles que formaron parte de la división Leclerc y participaron en la liberación: “Me parece que debería ser la bandera constitucional la que nos representase, porque es la que nos reconcilia a todos, pero también digo que los republicanos que liberaron París me representan”.

Hernando tiene tras de sí una larga trayectoria de polémicas, como cuando en 1997 aseguró que en TVE se borraron vídeos de Felipe González con Luis Roldán y luego se demostró que era falso. En 2000 tuvo que ser sujetado para que no agrediera a Rubalcaba en el Congreso y en 2012 tachó de “pijo ácrata” al juez Santiago Pedraz.

El diputado del PSOE Juan Moscoso aseguró que “Hernando suspendió primero de democracia” y le atribuyó “ignorancia”.