La Autoridad Fiscal reprende a Murcia y Madrid por sus previsiones
El Gobierno ahorrará 2.000 millones a las comunidades al financiarles la deuda
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIREF), el supervisor de las finanzas públicas, no se cree las proyecciones económicas sobre las que la Comunidad de Madrid y Murcia asientan sus presupuestos para el próximo año.
El organismo señala que hay autonomías que han ignorado los pronósticos del Gobierno para proyectar su nivel de ingresos y gastos para 2015. Así Andalucía, Aragón, Baleares, Canarias, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Galicia, Madrid, Murcia, Navarra, País Vasco y Valencia auguran cifras de evolución de la actividad económica diferentes de las del Ejecutivo central.
La AIREF considera que "las previsiones de PIB de Castilla-La Mancha y Cataluña, además de las de Madrid y Murcia, son optimistas. Por su parte, están centradas las de Aragón, Baleares, Canarias, Castilla-León, Comunidad Valenciana y Galicia. Y son cautelosas las de Andalucía, Navarra y País Vasco". También encuentra excesivos los augurios de empleo de algunas comunidades.
Por otra parte, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, explicó ayer en el Congreso algunas de las ayudas que prepara para las comunidades. El Gobierno prepara una mutualización de la deuda regional: el Tesoro Público emitiría las cantidades que necesiten las autonomías y les cobraría un interés del 0%, el coste financiero real lo asumiría el Estado. Esto supondría en la práctica en una subvención encubierta a cambio de aplazar la reforma del sistema de financiación.
El Gobierno calcula que el ahorro para las comunidades ascendería a unos 2.000 millones de euros. El ministro insistió en desligar estas ayudas de las elecciones y explicó porqué no se había puesto en marcha antes: "¿Lo podíamos hacer en 2012, cuando no había elecciones? Pues no, una medida como ésta era implanteable. Hoy lo es porque el Tesoro se puede financiar en esas condiciones, porque hemos recuperado la confianza". El Estado absorbe así una parte del ajuste presupuestario que tendrán que hacer las comunidades el próximo año, cuando el control del gasto será más difícil debido a la cita electoral.
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