Movimientos sociales y políticos han convocado manifestaciones en decenas de ciudades para pedir un cambio de Gobierno y protestar contra la corrupción
Las primeras movilizaciones se registraron en algunas ciudades del norte y noreste, las regiones más pobres del país, en las que miles de manifestantes demandaron el "fin" del Gobierno de Rousseff y expresaron su apoyo a las investigaciones sobre las corruptelas en la estatal Petrobras, que salpican a medio centenar de políticos. En la imagen, miles de personas protestan en Brasilia (Brasil).UESLEI MARCELINO (REUTERS)Las protestas han sido convocadas por grupos de la sociedad civil vinculados a los partidos de oposición, que también han manifestado su respaldo a las movilizaciones. En la imagen, protesta en la playa de Copacabana en Río de Janeiro (Brasil).CHRISTOPHE SIMON (AFP)Rousseff enfrenta una severa crisis política y económica, en un escenario de crecientes inflación y desempleo que han agudizado el malestar social y derrumbado su popularidad. En la imagen, protesta en Brasilia (Brasil).EVARISTO SA (AFP)El descontento ha repercutido en el terreno político, al punto de que el influyente Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), que lidera el vicepresidente Michel Temer, dio un primer paso hacia una posible ruptura con el Gobierno. En la imagen, protesta en Río de Janeiro (Brasil).CHRISTOPHE SIMON (AFP)Rousseff, quien tiene previsto pasar el día en su residencia oficial en Brasilia, reiteró que el Gobierno garantiza el derecho a las manifestaciones, siempre y cuando sean pacíficas. En la imagen, un grupo de personas durante la protesta en Río de Janeiro (Brasil).CHRISTOPHE SIMON (AFP)Un participante protesta contra el Gobierno brasileño en la playa de Copacabana, en Río de Janeiro (Brasil).CHRISTOPHE SIMON (AFP)Miles de personas protestan contra el gobierno de Dilma Rousseff en las calles de Río de Janeiro (Brasil).CHRISTOPHE SIMON (AFP)Participantes en la protesta contra Dilma Rousseff por las calles de Río de Janeiro (Brasil).CHRISTOPHE SIMON (AFP)Residentes de un bloque de viviendas en Río de Janeiro contemplan la protesta contra el gobierno de Dilma Rousseff.RICARDO MORAES (REUTERS)
