Guillermo Bárcenas: "No sé lo que es un 'hipster'"
Entrevistamos al hijo del ex tesorero popular y líder de la banda Taburete para hablar de música, populismos y 'El Pequeño Nicolás'
El pijerío madrileño anda revolucionado con Taburete, el grupo de Guillermo Bárcenas, (sí, su padre es…su padre). Willy, como le llaman sus amigos, es un chico despierto, atractivo y con unas condiciones vocales bastante aceptables. El grupo (de pop melódico de toda la vida) estaba compuesto por tres amigos, que ahora son dos (además del acompañamiento de otros amigos para grabaciones y conciertos), pero el alma mater, el frontboy, el ideólogo y el único que aparece en la cita que he concertado con el grupo en la tienda de ropa Hutton, de la que son imagen, es Guillermo.
Sonríe hasta seducir y desprende una seguridad anormal para un chaval de 26 años, pero habitual para ser un niño de papá con alma de rockero. Lo primero que me dice es que se quiere dedicar a la música el resto de su vida. Y lo tiene clarísimo. Eso sí, desde su zona de confort: El pequeño Nicolás protagonizó un spot anunciando un concierto tras conocerse una noche de copas; vive en el barrio de Salamanca; estudió administración y dirección de empresas y cine en la New York Film Academy; y trabajó “una temporada” en publicidad, pero no le gustó.
NOCHEBUENA TABURETERA en KAPITALPor razones de orden extra natural y por orden de la papa cósmica, TABURETE FILMS ha tenido que aguantar el lanzamiento de su primera producción...Después de las bofetadas de Black Friday y los clicks indiscriminados de Cyber Monday llega pal mundo TABURETE WEDNESDAY!Planazo de Bandera este 24 de Diciembre!#subealtaburete #taburete #taburetewednesday #willydirector #vivalapapa Posted by Taburete on miércoles, 2 de diciembre de 2015
En la página de Facebook de Taburete, en el apartado “sexo” dice “Electrochotis con toques New age, pero tranquilito". ¿Es así como se definiría Taburete?
Mi amigo Joaquín y yo nos conocimos en Barcelona en un colegio mayor y allí empezamos a tocar juntos. Entonces nos contrataron en un bar para tocar una noche, y el dueño nos mandó un email preguntando por el tipo de música que tocábamos. Yo iba un poco tocao cuando leímos el email, y le contesté lo del electrochotis con toques New age, pero tranquilito y el tío contestó: “Muy bien, gracias”.
Y Taburete a partir de ahí, lo está petando… Obviamente influye que seas el hijo de Luis Bárcenas, ex tesorero del PP.
No esperaba esta acogida, la acogida de Taburete se está comiendo todos los prejuicios. De hecho hay gente que ni sabe que soy el hijo de Bárcenas. Cuando se enteran, alucinan, les sorprende más. Y al final yo no habría hecho todo lo que he hecho, ni habría hecho entrevistas metiéndome en jardines que no eran el mío, si no fuera para hacer un poco de ruido. Y luego ya que escuchen la música… Yo sabía que a mucha gente le iba a gustar, porque es una música que no es complicada.
Es una música que gusta…
Yo soy monitor de campamento. Y los niños desde los 10 años ya están cantando las canciones, hasta gente de la edad de mis padres. Estaba convencido de que iba a gustar. Yo quería que se escuchase. Y a partir de ahí solo hablar de música, solo dedicarme a la música.
Lo mal que me ha venido lo de mi padre para algunas cosas, pero pensé “pues también que me venga bien”. El problema es que cuando me siento a hablar con alguien cojo confianza rápido. Y hablo, hablo… Pero también me he llevado palos de periodistas que cambian un titular y bueno, ya ando con cuidado, y gentuza hay en todos lados.
Pero tu primera actuación fue en el programa Punto Pelota ¿Por qué? ¿Cómo fue aquello?
Había un casting de tertulianos. Yo de tertuliano no me veía, pero hice una canción. La envié, y tenías que ver los comentarios. Decían “¡enchufao!” y no gané, quedé segundo. Entonces envié un video con una canción sobre Clemente, el entrenador, que se llamaba “El rubio de Barakaldo”. Les gustó, me escribieron, me pidieron un himno de la Eurocopa. Fui allí al programa, estaba acojonado, porque no estaba acostumbrado a las cámaras como ahora… ¡Y además ganamos la Eurocopa!.
¿Eres futbolero entonces?
Soy socio del Real Madrid y del Rayo. Voy a los dos campos, pero soy muy muy malo jugando. Entre amigos juego, pero en serio no.
Volvamos a Taburete ¿Cómo es la historia exactamente?
Empezamos Joaquín y yo en Barcelona, y su hermana está metida en cosas benéficas, así que tocamos en un bar por una causa benéfica, no recuerdo cuál. Y fue ella quien nos dijo que había un conocido que quería subir a tocar la caja con nosotros. Y me cayó bien, y sin conocerle de nada, y sin saber si tocaba bien o no, dije “contratado”. Tocamos juntos allí. Yo ni sabía que era nieto de tal. [Se refiere a Gerardo Díaz Ferrán, abuelo de su compañero de grupo Antón Carreño, y expresidente de la CEOE y Viajes Marsans, que curiosamente coincidió en Soto del Real con Luis Bárcenas, aunque estaban en módulos diferentes y “sólo coincidían en misa”]. Luego ya hablando con él, ya me dijo quién era. (Se ríe). Esto fue en 2014. Y ya en 2015 tocamos en Hoyo 19. Entonces entró Manolo a la batería, que es urólogo en La Paz, y Manuel Hevia y mi compañero de monitores, Guillermo Gracia Carrión, que es toledano y muy majo. Pero estos son los músicos [Taburete actualmente tiene solo dos patas, Guillermo y Antón]
Era un grupo de amigos sin más, hasta que subimos las canciones a Spotify, y allí empieza a compartirse y a compartirse y la gente vino a vernos al teatro Barceló que fue una locura, yo estaba en el campo, de monitor y me llegó un mensaje de “Está sold out” y el técnico de allí de la sala Barceló, nos lo dijo. Nos dijo “No veía nada igual desde Vetusta Morla hace 4 años, no veía un público tan entregado”. Y allí nos dimos cuenta. Aquello fue un punto de inflexión, con muchísimas posibilidades. Y pensamos ¿por qué no vamos a hacer lo mismo en Barcelona y en toda España?
Joaquín no quería compromiso y le dije: “sigues en la parte espiritual”, y contacté con mi primo Antonio y este es el grupo actual. Tocamos en el Apolo de Barcelona que fue sold out del todo. Y fue un subidón.
Pero eres tú el alma del grupo. Eres tú quien compone…
Yo compongo grabando con el móvil, y empiezo a improvisar: tiro acordes y sobre esos acordes canto lo que me sale, saco canciones de ahí y luego hacemos las letras. Tenemos repertorio para hacer cuatro o cinco discos.
Pero tú lo que más escuchas es Extremoduro ¿no?
Es mi grupo favorito, pero no son una influencia. Es el único grupo por el que me he hecho viajes. Me he ido a verles a todas partes. Me los enseñó mi hermano cuando tenía 8 ó 9 años y desde ahí para siempre. Son el grupo de mi vida. Yo soy muy de Viña Rock, en realidad.
Como un grupie… Tú empiezas ahora a tener groupies…
Si, me encanta…
¿Y novia?
Ahora no tengo.
¿Cómo te gustan las chicas?
Físicamente no tengo un patrón. Me gustan altas, llenitas, pelo largo, pelo corto… todo. De carácter que no sean un coñazo y que te dejen vivir.
¿Te gustan las locas?
Estoy un poco cansado de locas. Pero las que no están locas, me aburren, y además me aburren muy rápido. Me falta encontrar esa que tenga el equilibrio.
¿Sí?
El problema es que no quiero encontrar a nadie.
Y eres hetero convencido…
Sí, todos los del grupo.
¿Pero entendéis la homosexualidad?
Por supuesto. Tengo amigos y familiares homosexuales. Todo eso ya pasó. Cada vez hay menos marginación… (Se pone muy serio) Yo soy de derechas. De siempre. Ahora igual con la situación que hay, lo soy más. Pero de temas sociales: matrimonio homosexual, todo eso, todo lo que sea dejar a la gente vivir en paz…
¿Entonces en temas sociales eres más de izquierdas?
Sí, claro.
¿Por ejemplo los desahucios?
Los desahucios… al final si yo tengo un piso y yo lo alquilo en unas condiciones y a mí no me pagan en un año, es normal que yo busque a alguien que me pueda pagar y yo poder vivir. Lo de los desahucios es un asco y es una pena. Sobre todo es una pena.
Pero hay viviendas vacías…
Alguna fórmula tendrán que encontrar. Es la época en la que más toca hablar y no hacer el puto show, que es lo que están haciendo todos. Hay que hablar y ponerse de acuerdo en cosas tan simples como esas. Y como la educación, sanidad…
Yo tengo amigos de izquierdas, de derechas, y luego hablando uno a uno al final vemos que estamos de acuerdo mucho más de lo que te piensas, el problema es que cuando estás detrás de unas siglas… Mira, siempre se pueden acercar posturas y llegar a algo a lo mejor, y ya está.
¿Qué piensas de Podemos?
El problema de Podemos, y el problema de los políticos en general es que no tienen credibilidad. No tienen porque un día dicen una cosa, al día siguiente dicen otra… no tienen credibilidad.
¿Todos los políticos? ¿Todos los partidos?
Todos los políticos no. Pero las cabezas visibles… El PP al final prometió unas cosas, y evidentemente tenía que haber recortes, tenía que haber y muchas de las cosas que han prometido, no las han cumplido.
(A estas alturas, Guillermo gesticula como un político convencido. Cree en su discurso, y es evidente que no necesita testarlo con nadie. Al referirse a Pablo Iglesias, ni le nombra…)
Pero Podemos presenta un programa para las europeas, presenta otro para las autonómicas, otro para las otras… cabreado y tal… Ahora le han debido asesorar que sonría más a la cámara, que esté más simpático y esté más relajado y tal… es lo que le toca hacer. Pero Podemos viene de donde viene, y es que es así. Hay un libro muy bueno, que se llama Asaltar los cielos que no se posiciona por ningún lado, pero explica muy bien de donde vienen Errejón, Pablo Iglesias y Monedero, del comunismo radical y del chavismo. Está bien que se sepa ¿Les quieres votar? Estupendo, pero que se sepa.
Tener un padre en la cárcel es bastante duro. Pero si yo soy Pepito Pérez no pasa de ahí. Es más duro lo mío, que es tan mediático que están todo el día llamándole hijo de puta
A Guillermo parece que le han dado cuerda, porque habla y habla cuando se trata de cuestiones políticas. Es el único momento en el que ha dejado de sonreír.
…Y el PSOE es un partido que tiene un pobre maniquí delante, no se le ve mal tipo, pero está ahí y no sabe ni cómo ha llegado, y entonces va a hacer lo que sea. O es presidente del gobierno o va al paro. No tiene más opciones.
¿Te gustaría dedicarte a la política?
Creo que se me daría bien [la sonrisa vuelve a posarse en su cara]. Pero después de todo lo que ha pasado en mi familia… Si ya hay prejuicios siendo músico, imagínate si entrara en política, ya sería la de Dios.
¿Y qué aficiones tienes?
El esquí, pero llevo años que lo practico menos.
¿Por qué?
Por dinero. Sale muy caro. Tenemos casa en Baqueira, pero sale muy caro. Cuando tienes tú que pagarte todo, y vives solo de la música y de los campamentos… Yo ya no veo un euro en casa…Y bueno, también la montaña: trekking, alpinismo, me apasiona todo lo que tenga que ver con la montaña… estar solo.
Pero ¿ese rollo hippy de ver amanecer y fumar porros?
Eso también (se ríe). A veces me gusta ir solo, ir a la montaña, dormir en el refugio, y si no hay refugio, hacerlo en un día. Pero salir de esto, que cansa un poco. Es típico decirlo, pero la ciudad me acaba saturando. Me gusta ir a Gredos, en la sierra fuera de la ciudad. No puedo estar así en una oficina… me pego un tiro. Lo aguanto dos años si hay que aguantarlo, pero quiero tocar la guitarra debajo de un cocotero.
¿Y otras aficiones? ¿Te interesa la moda? Taburete sois imagen de la marca Hutton…
Nunca me ha interesado mucho, la moda en general no me ha llamado nunca, pero veo marcas y tengo claro lo que me gusta y lo que no. Un día voy de una forma y otro voy de otra que no tiene nada que ver. A veces voy muy arreglado y afeitado y a veces voy guarro. Hutton me gusta por eso, porque tiene de todo, las poleras como ésta me gustan mucho.
Has vivido experiencias vitales fuertes: Hasta un secuestro, de un falso cura, que ya ha sido juzgado y todo… ¿Te inspiran a la hora de hacer canciones?
Le dediqué una canción al falso cura. Yo las cosas malas las olvido rápidamente, no me dejan secuelas. Cuando pasó todo esto del cura, esa noche me fui a tomar una copa por la noche. Estuve en shock el primer momento. Cuando saca la pistola y dice “No soy sacerdote”. En el primer momento no sabía si era una coña, si era una metáfora o qué. Nos maniató a los tres con bridas y hubo un momento que pensé que me iba a matar. Pero no sé por qué, no sé de qué forma rompí las bridas y me tiré en plancha, como un acto reflejo. Y ni mi madre ni yo tenemos secuelas, menos mal.
Y sí, tener un padre en la cárcel es bastante duro. Pero si yo soy Pepito Pérez no pasa de ahí. Es más duro lo mío, que es tan mediático que están todo el día llamándole hijo de puta. Al principio eso sí que duele, pero luego te haces. La gente no le conoce, pero claro, yo sí sé cómo es.
Guillermo de nuevo se embarca en sus propios pensamientos y recuerdos, se acelera, se olvida de que está en una entrevista y se embala:
Le iba a ver todas las semanas. Podía verle una vez por semana a través del cristal y una vez al mes vis a vis, que le puedes tocar. La primera vez que fui, fui solo. Era un día después de que entrara en prisión, había mucha prensa y a mi madre le dijeron “quédate en casa” así que fui yo a verle.
No había ido a la cárcel en mi vida. Me puse un chándal y una gorra, normal… y cuando me vio mi padre dijo “¿Qué cojones haces así? Aquí vienes bien vestido”. Y a partir de ahí nos obligaba a ir en camisa, como iba él. (Intuyo que se refiere a su único hermano, más mayor, y a él) La verdad es que somos una familia que tenemos un par de pelotas. Tenemos la capacidad de sacar las cosas adelante todos… Las cosas le hacen uno fuerte. Yo no siempre he sido así. Cuando me atracaban a los 14 años, yo era cagoncete, y ahora, no es por nada, pero no me tose nadie. Con todo lo que ha pasado, vas cambiando, te vas haciendo fuerte, y te haces duro y lo que antes era un palo o un trauma, ya no.
Ahora cosechas fama y también críticas…
Empiezan a pedirme fotos por la noche y tal, y me encanta. Cuando tú te dedicas a algo, tiene cosas mejores y peores, pero no puedes ir de divo, ni poner pegas a una foto… y vale que son los inicios pero te garantizo que voy a ser así siempre en toda mi vida. Y si alguna vez soy famoso y no lo hago, dejaré que me lo digan, pero coño, vives por tus fans, vives por la gente que te escucha… Como no les trates bien, -no bien ¡muy bien!- te estás tirando piedras encima. Y sí, me encanta que me pidan fotos.
Los haters musicales me dan igual. Me pueden doler un poco las críticas musicales cuando llegan, pero las críticas por chorradas, me descojono. No contesto, y si lo hago es diciendo “Qué alegría, pase usted unas felices fiestas” y ya está.
No había ido a la cárcel en mi vida. Me puse un chándal y una gorra, normal… y cuando me vio mi padre dijo “¿Qué cojones haces así? Aquí vienes bien vestido”.
La canción Los amos del piano bar trata del Tony 2, el piano bar con más solera de Madrid y probablemente de España. Es un lugar kitch, lúmpen, rancio y romántico… Ya no voy tanto pero hubo una una época que estábamos en el Tony 2 todo el día. En el café Iberia y en el Tony 2 ¡Vivíamos allí! (El café Iberia es conocido por su amplitud de horarios y es frecuentado por taxistas y noctámbulos que no encuentran nada abierto) Nos lo pasábamos increíble allí… Con gente de todas las edades. Me gusta el rollito Juanito Valderrama y todo eso… Estar ahí con gente de todas las edades, señoronas, gente madura… Tenía mis dos o tres canciones impepinables Noches de Bohemia, Sigo siendo el rey y Mi limón limonero.
¿Cómo venderías tu disco con un eslogan?
(Se lo piensa un ratito) Música para todos y para todo.
Es un disco autoeditado…
Sí, fuimos a ver a Subterfuge, Warner y Universal, pero ahora con Internet, con redes sociales, te lo puedes montar tú solo. Y tenemos equipito, tenemos manager… Somos como una familia. Tenemos un séquito. Lo que se dice un séquito de verdad.
En directo somos muy rockeros. El disco es muy pop y muy simple. En concierto es la de Dios, hay que vernos en directo. Es una locura. Próximamente nos esperan conciertos en la sala Canalla de Zaragoza, en Bikini de Barcelona y en el Teatro Barceló de Madrid.
¿Qué piensas de los hipsters?
No sé qué es eso. No sé qué es ser hipster. Mi ex novia los odiaba. Mi ex novia era de Podemos, para que veas. Ella iba más por Malasaña. Yo salir de bares me encanta, pero te dejas mucho dinero… Mis amigos son más clásicos. Yo soy más de copas en casa. Prefiero comprarme mi botella y talármela en casa.
Mi conclusión es que Willy (a estas alturas ha dejado de ser Guillermo) vive preso del ambiente rancio del PP, pero tiene una vitalidad y una inocencia podemita y juvenil. Y un encanto personal que le va a ayudar mucho. En la música y en lo que se proponga.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.