_
_
_
_
Aisha quiere ser costurera. Cuando tenía 15 años, trabajó durante seis meses como kayayei, porteadora de mercancías sobre su cabeza, en la capital de Ghana, Accra. Un tipo de trabajo infantil peligroso para la salud --provoca fuertes dolores de espalda-- al que se dedican unas 200.000 niñas en el país, según las estimaciones de las organizaciones locales.
15 fotos

La costura como segunda oportunidad

En Ghana, miles de niñas encuentran en la educación y el aprendizaje de un oficio una salida a la esclavitud laboral a la que son sometidas por comerciantes cuando llegan a la capital en busca de oportunidades

_
_