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La destronada miss birmana se queda con la corona

La organización le reclama la tiara de 76.000 euros tras quitarle el título de Miss Asia Pacific World por "mentirosa" e "ingrata"

Macarena Vidal Liy
May Myat Noe, ante su corona, durante su rueda de prensa el martes en Yangon.
May Myat Noe, ante su corona, durante su rueda de prensa el martes en Yangon.Gemunu Amarasinghe (AP)

May Myat Noe, de 16 años, estaba viviendo un sueño. Esta joven birmana, procedente del que hasta hace poco era uno de los regímenes más cerrados del mundo y donde hace tan sólo tres años era impensable que una de sus ciudadanas participara en un concurso de belleza, había ganado en mayo el certamen surcoreano Miss Asia Pacific World. El premio, una tiara cuajada de piedras preciosas y el comienzo de una carrera como rutilante estrella del pop en Seúl. O eso creía ella.

Cuatro meses más tarde, May se encuentra de vuelta en su ciudad, Yangon, y está inmersa en una dura disputa con los organizadores del concurso de belleza. Estos le han retirado el título, le acusan de haber mentido, de ser de poco fiar y de “ingrata”. Según ellos, la joven ha regresado a Birmania después de que la compañía le pagara una operación de aumento de pecho, como parte de los planes para lanzarla al estrellato, y no ha devuelto la corona, valorada en 100.000 dólares (unos 76.000 euros), pese a haber sido “destronada”.

En una rueda de prensa en Yangon, la joven ha rechazado las acusaciones y ha asegurado que sólo devolverá la tiara cuando reciba una disculpa formal de los organizadores, dirigida a ella y a su país.

Según May, los organizadores falsificaron su edad -declararon que tenía 18 años- y la presionaron para que se sometiera a la operación, que niega haberse hecho. Las presiones, según ella, no se quedaron allí: también debía ofrecer servicios de compañía a altos ejecutivos “cada vez que los requirieran”, con vistas a recaudar fondos para su futuro álbum musical.

May Myat Noe, que rechaza las acusaciones, solo devolverá la joya si recibe una disculpa

“Es natural que sienta que debo exigir una disculpa para rectificar el daño que han hecho a la integridad de mi país”, afirmó la joven, unas declaraciones recogidas por la agencia AFP. Una vez que reciba la disculpa, devolverá la tiara de inmediato. Según ella, regresó a Yangon antes de que se le retirara el título y sólo al llegar a su casa supo que le reclamaban el valioso tocado.

En Seúl, el fundador del concurso, Choi Youn, negó tajantemente las acusaciones de May y aseguró que su compañía se prepara para denunciarla ante la policía. “Es un no rotundo”, declaró a la agencia Reuters. “No es verdad”. Siempre según Choi, la joven se sometió a la operación de cirugía estética en la ciudad surcoreana de Busan el 20 de agosto. Pese a ser menor, se le permitió hacérsela porque su madre había dado permiso. El empresario también aseguró que fue ella quien mintió sobre su edad pero se le permitió participar en el concurso de todos aunque antes descubrieron su fecha de nacimiento real.

El concurso Miss Asia Pacific World ya se ha visto rodeado de la polémica en ocasiones anteriores. En 2011, la concursante galesa Amy Willerton, de 19 años, aseguró entre otras cosas que las participantes no recibían más que una comida al día. Willerton, según publicó en su día la prensa británica, se retiró del concurso tras los tres primeros días, entre denuncias de presiones sexuales a las jóvenes a cambio de mejores resultados en el certamen.

La polémica ha sido seguida con enorme atención en Birmania, donde May se ha convertido en una auténtica celebridad tras su triunfo en el concurso en mayo. En su página de Facebook sus seguidores han colgado numerosos mensajes de ánimo. Aunque el apoyo no es unánime: otros internautas, le instan a devolver la corona y seguir adelante con su vida.

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Sobre la firma

Macarena Vidal Liy
Es corresponsal de EL PAÍS en Washington. Previamente, trabajó en la corresponsalía del periódico en Asia, en la delegación de EFE en Pekín, cubriendo la Casa Blanca y en el Reino Unido. Siguió como enviada especial conflictos en Bosnia-Herzegovina y Oriente Medio. Licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid.

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