El escándalo BMW continúa

El supuesto novio chantajista de la millonaria y principal accionista de BMW en Alemania, Susanne Klatten, que lo denunció en noviembre del año pasado, ha sido condenado a seis años de cárcel tras haberse declarado culpable de haber seducido no sólo a Klatten, sino a varias mujeres ricas durante los últimos años. Identificado como Helg Sgarbi, y apodado por la prensa como el gigoló suizo, el acusado es un ciudadano suizo de 44 años que tenía como afición extorsionar a mujeres millonarias.

Durante el juicio, celebrado en la Audiencia Provincial de Múnich, Sgarbi ofreció una disculpa a sus víctimas y, según informa la BBC, dijo que se arrepentía profundamente de sus actos. El gigoló suizo está acusado de recibir un total de nueve millones de euros de sus estafadas, ninguna de las cuales acudió al juicio. En la mayoría de los casos, Sgarbi actuaba de la misma manera: enviando chantajes a través de correos electrónicos, en donde extorsionaba a sus víctimas con material personal que él haría público si no le pagaban.

Tres de las mujeres fueron mencionadas en el juicio mediante sus iniciales, mientras que Susanne Klatten, la millonaria de BMW, dio su consentimiento para ser nombrada.

El caso de la heredera alemana

Susanne Klatten, una mujer de negocios casada, madre de tres hijos y dueña del 12,5% de las acciones de BMW, fue engañada por el gigoló hace unos años, mientras ambos mantenían una relación. Sgarbi la convenció de entregarle siete millones de euros, los cuales, dijo, necesitaba para pagar a la familia de una niña que había herido durante un accidente en Florida.

La mujer, que obviamente necesitaba mantener en secreto la relación con Sgarbi, le entregó el dinero en septiembre de 2007, por lo que más tarde, Sgarbi le hizo otra petición: esta vez quería 290 millones de euros para comenzar una vida desde cero junta a ella. Esta vez, Klatten se negó y con ello empezaron sus problemas de chantaje.

A raíz de su negativa, Sgarbi la amenazó con difundir un vídeo que tenía de ambos manteniendo relaciones sexuales en un hotel en Múnich. Le dijo que si no le entregaba 49 millones de euros, lo haría público. Más tarde, bajó esa cifra a 14 millones, intentando convencer a su víctima con frases del tipo: "Mientras tu riesgo es muy alto, el mío es irrelevante". Fue en ese momento cuando Klatten decidió hacerlo público.

Sin embargo, la heredera del imperio BMW no es la única víctima conocida del gigoló, que en su momento estafó a la Condesa Verena du Pasquier-Geubels, más de cincuenta años mayor que él. Ella también lo denunció a la policía, pero retiró los cargos antes de morir en 2002.