“Es el momento de crecer y sacaré el dinero de donde haga falta”
El presidente de la cadena hotelera Room Mate quiere duplicar su negocio en hoteles
El presidente de la cadena Room Mate, Kike Sarasola (Madrid, 1963), es un hotelero atípico. No tiene problema con ocupar al mismo tiempo páginas de la prensa rosa y la económica. Es, dice, un empresario “impulsivo”, que siempre ha querido que su negocio tuviera “una cara visible”. Es el máximo responsable de una veintena de hoteles y, a lo largo de este año, quiere duplicar su negocio con otros 25 establecimientos en España y el extranjero. Además, mientras el resto del sector ha declarado la guerra a las aplicaciones de alquileres entre particulares, como AirBnb, Sarasola ha decidido abrazar al enemigo: en septiembre lanzó Be Mate, una plataforma de viviendas en alquiler con servicios de hotel. Ahora, además, acaba de comprar Alterkeys, otra red de alquileres que le permite sumar a su portafolio 100.000 nuevas viviendas que se pueden arrendar por días, el grueso, de particulares. “El Consejo de Ministros me ha concedido la medalla al Mérito Turístico a la Innovación. Los resultados de la empresa han sido muy buenos. Hemos comprado una empresa... La verdad es que ha sido un año buenísimo”, resume Sarasola.
Pregunta. En septiembre lanzó la plataforma de apartamentos Be Mate y ahora compra Alterkeys. ¿Es un desafío para el resto del sector hotelero?
Respuesta. No. No es eso. La economía colaborativa existe desde hace muchos siglos. Si la cosa ya existe y no va a desaparecer, por mucho que quieran algunos lobbies, yo creo que lo que hay que hacer es adaptarse y mejorar el sistema.
P. ¿En qué consiste su adaptación?
R. Lo que yo he querido hacer con Be Mate es ofrecer lo que los clientes demandan. Porque el cliente es lo único que importa. Hay personas que prefieren alojarse en un apartamento, por ejemplo, si viajan con niños. Hasta ahora, sin embargo, la oferta principalmente estaba en dos segmentos: por un lado, operadores de gran lujo con servicios como limusinas o cocineros. Por otro, la oferta de las nuevas empresas de Internet, que ponen en contacto a particulares pero sin garantías de legalidad o seguridad. Con Be Mate queríamos ocupar el nicho de mercado de en medio: el cliente alquila el apartamento, pero tiene a su disposición nuestros hoteles para proporcionarle algunos servicios opcionales, como lavandería o conserje disponible 24 horas por si tiene algún problema.
P. ¿Absorberá Be Mate los 100.000 apartamentos de la red de Alterkeys?
R. De momento vamos a mantener las dos marcas, aunque algunas de las viviendas de Alterkeys, con determinadas características, pasarán a Be Mate. Y cuando esta empresa tenga apartamentos en ciudades donde Room Mate no tiene hoteles, buscaré hoteles fuera del grupo para que puedan ofrecer los servicios extra a los apartamentos.
P. ¿Cuánto han pagado por Alterkeys?
R. Una parte la hemos pagado en dinero, y otra, con acciones de Be Mate. La cifra no es pública.
P. Los hoteleros acusan a las webs de apartamentos de particulares de generar competencia desleal, porque muchos de los propietarios no cumplen la ley ni pagan impuestos. ¿Los suyos sí?
R. Tanto los apartamentos de Be Mate como los de Alterkeys tienen todos los papeles en regla. Cumplen la normativa de apartamentos turísticos de la ciudad en la que están. Yo, al igual que todos los hoteleros, también creo que no es justo que muchos en este sector no cumplan las reglas. Por eso pido que a los hoteleros se les quiten algunas de las regulaciones excesivas que soportan y a los apartamentos se les pongan las normativas adecuadas.
P. ¿Cuáles son esas normativas adecuadas?
R. Pues las normativas inteligentes. Tampoco hay que caer en poner trabas absurdas ni elaborar 20 leyes distintas en cada comunidad. Algunas ciudades del mundo ya han regulado la economía colaborativa con éxito. ¡Copiemos los mejores ejemplos! Yo, como empresario, si veo que algo funciona, lo copio. ¿Por qué la Administración no hace lo mismo?
P. Sobre apartamentos turísticos, ¿alguna normativa de España le convence?
R. Yo creo que Barcelona, por ejemplo, lo ha hecho bastante bien, porque exige a los dueños de apartamentos turísticos sacar una licencia, y así garantiza que se pagan los impuestos y que hay un mínimo de calidad.
P. ¿Cuáles son los objetivos de sus empresas para este año?
R. Las perspectivas son buenísimas. Nos gustaría que los apartamentos de Be Mate lleguen a 40 o 50 ciudades y que Room Mate tenga en total entre 45 y 50 hoteles en España y fuera.
P. ¿Cuáles serán las próximas aperturas de su cadena hotelera?
R. Empezamos el año con 21 establecimientos funcionando y ya hemos firmado nueve hoteles nuevos, que abriremos a lo largo de 2015 o a comienzos de 2016: dos en Estambul, uno en Rotterdam y otro en Milán, tres en Barcelona, uno en Málaga y otro en Miami. En total, eso son 30 hoteles. Pero acaba de empezar el año. Me quedan 11 meses para encontrar oportunidades y terminar el ejercicio con 45 o 50 hoteles, entre los que estén ya abiertos y los proyectos firmados.
P. Sus hoteles se caracterizan por el diseño y la buena ubicación. Tener una cadena tan grande ¿no devaluará la marca?
R. No. Cuando empecé, me decían que no iba a poder gestionar igual dos hoteles que 10. Y lo he hecho. ¿Cómo lo haré cuando tenga 50? Pues igual: trabajando, disfrutando del negocio y apoyándome en mi equipo, que es lo más valioso que tiene Room Mate. Toda mi gente sonríe.
P. ¿De dónde saldrá el dinero para abrir 25 hoteles?
R. De debajo de las piedras si hace falta. Créditos, socios, inversores... Lo que haga falta. Es importante recordar que no compramos los edificios, sino que los reformamos y gestionamos en régimen de alquiler o por acuerdos con los propietarios. Y espero que este año haya más liquidez. En el último semestre de 2014 se empezó a notar más crédito.
P. ¿Se plantea salir a Bolsa?
R. Estamos considerando todas las opciones, desde el mercado de deuda a la Bolsa y los bonos. Es el momento de crecer. La gente está entusiasmada con Room Mate y me llegan muchas ofertas de propietarios de edificios para que abramos hoteles.
P. Los ingresos fueron el año pasado de 47 millones de euros, un 29% más que hace un año. ¿De cuánto fue el beneficio neto?
R. Esa cifra no la voy a decir. Pero sí que la empresa es rentable, y que el Ebitda es positivo. Además, el inicio de 2015 ha sido increíble. La facturación de enero ha crecido el 25%.
P. ¿Nunca han tenido problemas económicos?
R. No. Hemos notado la crisis, como todos, y una empresa que crece como la nuestra siempre necesita dinero. Pero nunca hemos estado en problemas. Los bancos nos apoyan mucho y tengo unos socios, como Sandra Ortega, muy comprometidos. Hemos recibido ofertas de inversores para entrar, y a algunos les hemos dicho que no, porque no lo necesitamos ahora. La empresa va bien. El turismo mejora cada día, y se nota que los españoles vuelven a viajar y a tirar del carro.
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