Premio Alfons el Magnànim a una "novela psicológica"

Una "novela psicológica" se ha llevado los 30.000 euros con los que la Diputación de Valencia dota el premio de narrativa en valenciano Alfons el Magnànim. El autor, Silvestre Vilaplana (Alcoi, 1969), licenciado en Filologia Catalana y que en la actualidad ejerce la docencia en el Instituto La Foia de Ibi, se lleva el premio por El quadern de les vides perdudes, una novela "que atrapa desde la primera página con un protagonista que padece una progresiva degradación física y mental envuelto en una serie de crímenes", según el fallo del jurado. Sus miembros han destacado de este trabajo su modernidad y su originalidad: "Estamos convencidos de que la obra impactará y gustará a lectores de todas las edades". El quadern de les vides perdudes será publicada por Bromera.

La diputada de Cultura, María Jesús Puchalt, compareció ayer con los miembros de los jurados para dar a conocer las tres obras ganadoras de los premios Alfons el Magnànim de 2011, a los que este año se han presentado 205 obras. Unos galardones que cuentan con tres categorías: narrativa en valenciano, poesía en castellano y poesía en valenciano.

En poesía en castellano, con una dotación económica de 15.000 euros, la obra ganadora es Tempero, de Fermín Herrero (Ausejo de la Sierra, Soria), licenciado en Filología Hispánica. Tempero será editada por Hiperion. Una obra que destaca, según el jurado, "por la limpidez y frescura de su visión y su lenguaje, centrados en el paisaje castellano, trascendiéndolo y reflexionando sobre la condición humana a partir de la contemplación y la comprensión de la naturaleza".

Por último, el premio de poesía en valenciano corresponde al poemario de Dolors Miquel (Lleida) Gàrgola, que también publicará Bromera. Miquel recibirá otro premio económico de 15.000 euros. "Es una obra redonda, desde el primer poema, sin altibajos", según el jurado.