Moratinos opta mañana en Roma a la dirección general de la FAO
Su candidatura compite con la del gran favorito, el brasileño Da Silva
Miguel Ángel Moratinos afrontará mañana en la imponente sede romana de la FAO (siglas en inglés para Organización para la Agricultura y la Alimentación) el desafío de convertirse en el nuevo director general del organismo de Naciones Unidas. De salir elegido por los casi 190 países miembros, el exministro de Exteriores se convertiría en el primer español en presidir este organismo.
La batalla se presenta ardua e imprevisible. Moratinos luchará contra otros cinco candidatos por relevar al senegalés Jacques Diouf, quien gobierna la FAO desde hace 18 años. El rival más temible, y gran favorito es, según todas las fuentes, el brasileño José Graziano da Silva, exministro del Gobierno de Lula da Silva y estrella de su proyecto Hambre Cero.
El exministro estará arropado por dos ministras y De la Vega
Graziano parte de salida con el apoyo del bloque regional latinoamericano, salvo México, que ha anunciado su voto al candidato español, y además tiene a favor a los países lusófonos de África. Pero el sistema de votación de la FAO hace muy difícil establecer pronósticos. En cada ronda hay un voto de tanteo y otro real, y cada turno sirve para eliminar a un candidato. Pero el proceso se interrumpe en el momento en que uno de ellos alcance la mayoría absoluta. El sufragio es, además, secreto y vale tanto el voto de Tonga, uno de los países visitados por Moratinos, como el de EE UU o China.
El exministro parte con la desventaja inicial de no poder disponer de todos los votos europeos, que se dividen entre él y el candidato austriaco, Franz Fischler, impulsado a mitad de camino por el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, según algunas versiones con la intención de favorecer a Graziano.
Algunas fuentes acreditadas ante la ONU consideran, en todo caso, que Moratinos puede hacerse con la victoria final si consigue superar el primer corte. Si el candidato brasileño no lograra la victoria en esa primera vuelta por mayoría absoluta, Moratinos tendrá entonces "muchas posibilidades de ganar a Graziano", dice un embajador latinoamericano que prefiere mantenerse anónimo. En ese caso, contará más el peso de los grandes países. La secretaria de Estado de EE UU, Hillary Clinton, ha tenido palabras de elogio para Moratinos, pero ha evitado revelar en público el sentido de su voto. China tampoco lo ha hecho.
El Gobierno cuenta con que, una vez eliminado el austriaco Fischler, Moratinos concentrará el voto europeo y lo mismo sucederá con el voto árabe si caen los candidatos de Indonesia (Indroyono Soesilo), Irán (Mohammad Saeid Noori Naeini) e Irak (Abdul Latif Rashid).
Las bazas de Moratinos son su dilatada experiencia diplomática, su apuesta por la inclusión de la FAO entre las grandes instituciones de la gobernanza mundial y la propuesta de nuevas formas de financiación. Los candidatos expondrán hoy sus programas ante la asamblea general, y mañana a las diez de la mañana comenzarán las votaciones.
El exministro estará arropado por la ministra de Medio Rural, Ambiente y Marino, Rosa Aguilar, y la de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez. Además, ha viajado a Roma la exvicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega.
Su equipo ha estado formado por tres diplomáticos, una secretaria y un funcionario de Agricultura; así como un Falcon del Grupo 45 de la Fuerza Aérea para algunos desplazamientos.
La FAO tiene un presupuesto para este año de 1.555 millones de euros, el 45% procede de las cuotas aportadas por los países miembros, y el resto son contribuciones voluntarias. El nuevo director deberá renovar a fondo un organismo elefantiásico, que tiene 3.600 empleados y que en este momento invierte en personal cerca del 70% de sus fondos.
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