Decomisados en Parla 500 kilos de cocaína, el mayor alijo del año
El aviso de un robo permitió a la Policía Local descubrir la droga
Casi fruto del azar, la policía se hizo ayer con el mayor alijo de cocaína decomisado este año. Una nave industrial de Parla (115.600 habitantes) ocultaba unos 500 kilos de cocaína, lista para ser distribuida a intermediarios. La operación permanece abierta para descubrir cuál es el origen del estupefaciente y por dónde se iba a distribuir. Hasta el momento, se ha detenido a un hombre de nacionalidad colombiana y se ha recuperado un arma de fuego.
Fue la Policía Local de Parla la que se topó con el alijo. La central de comunicaciones de este cuerpo recibió a primera hora de la mañana de ayer una llamada en la que un comunicante anónimo alertaba de que se estaba produciendo un robo en el interior de una nave industrial en la calle de Berlín, en el polígono industrial Ciudad de Parla. Cuando acudieron los agentes, no vieron nada extraño en el exterior del edificio. Llamaron a la puerta y les abrió el hombre de nacionalidad colombiana, al que identificaron.
Detenido un hombre que vigilaba el inmueble donde estaba la mercancía
Cuando entraron en la nave, se encontraron con la droga almacenada, por lo que le arrestaron de inmediato. No opuso ningún tipo de resistencia. Ha sido acusado de un delito contra la salud pública (narcotráfico). Ayer estaba pendiente de ser interrogado. Pasará a disposición judicial a lo largo del día de hoy, según fuentes de la investigación.
Los policías avisaron a sus homólogos de Estupefacientes de la comisaría de Parla. Tuvieron que pedir una orden judicial de entrada y registro para poder decomisar la cocaína, que estuvo vigilada durante toda la mañana. A mediodía, el juzgado de guardia permitió entrar en la nave. Mientras, la actividad de la zona era la normal en un día laboral, sin que llamara la atención la policía desplegada, según comentaron algunos empresarios y comerciantes de la zona industrial.
En un primer momento se pensó que la cantidad de droga era bastante mayor y que podría superar la tonelada, pero tras ser recontada y pesada alcanzaba la mitad aproximadamente. Los policías también encontraron una pistola, que ha sido remitida a los laboratorios de la Policía Científica para determinar si se ha utilizado en algún crimen.
La droga fue trasladada a los almacenes de la policía. Parte también se mandó a la Dirección General de Farmacia, que se encargará de precisar la pureza exacta de la cocaína decomisada.
Fuentes policiales explicaron que la media tonelada de estupefaciente podría alcanzar los 16 millones de euros si hubiera sido vendida al por mayor, sobre todo si tiene una gran pureza. Esta se considera entre el 70% y el 80%. Al por menor -en papelinas- el precio habría superado los 55 millones de euros.
Las investigaciones las está realizando la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Brigada Provincial de Policía Judicial junto con los especialistas en estupefacientes de la comisaría de Parla. Su cometido se centra ahora en saber quién alquiló la nave industrial, cuánto tiempo llevaba allí el estupefaciente y quiénes eran sus destinatarios.
Tal cantidad de droga suele estar en manos del primer escalafón de venta, que la importa directamente de Sudamérica. Una vez que llega a España, este grupo la pasa a intermediarios. Tras cortarla, estos a su vez la venden en cantidades menores, como dos o tres kilos, al narcotraficante, que termina de adulterarla y hace dosis que venden directamente a los consumidores en poblados chabolistas o en zonas de ocio.
Diversas fuentes policiales se felicitaron ayer por el hallazgo de los agentes locales de Parla, ya que supone cerrar el año con un gran alijo, el mayor del año hasta el momento. Hay que remontarse hasta el 25 de febrero de 2009 para encontrar una cantidad similar. En aquella ocasión fueron 600 los kilos de cocaína decomisados a dos agentes de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) y a tres futbolistas. El estupefaciente también estaba en una nave industrial, pero en esta ocasión de la capital. Había entrado en España como maquinaria de molinos de viento y soportes de bronce.
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