La huelga de los controladores aéreos
Soy licenciado en Medicina y Cirugía tras seis años de estudios, especialista en Medicina Interna y en Nefrología tras otros ocho años y doctor en Medicina. Trabajo en un hospital público desde hace 25 años con enfermos trasplantados o con insuficiencia renal. He visto morir a pacientes bajo mi responsabilidad de todas las edades. Soy delegado sindical y sé lo que es tratar con la Administración. He visto en televisión cómo un representante de los controladores aéreos, hablaba de presión y estrés, llevándoles al límite: "Abandonar el puesto de trabajo alegando problemas de salud".
Espero que ninguno de los controladores o sus familiares acuda a un hospital y le digan que no le pueden atender porque casi todos los profesionales sanitarios están "enfermos". Podrán alegar que mi responsabilidad es distinta, y yo les diré por qué mi sueldo es muy inferior al suyo trabajando más de 2.100 horas al año. Por la crisis nos han bajado el sueldo y otras mejoras laborales, pero nunca, nunca, he pensado en abandonar mis obligaciones con los pacientes.
Les reto a que acudan a un hospital y vean trabajar a médicos y enfermeros con pacientes graves. Que acudan a cualquier quirófano donde se está realizando un trasplante, o extrayendo un riñón a un donante sano que se lo dona a un familiar, y así un largo etcétera, para que vean lo que es el estrés. No hay nada más estresante que ver morir un paciente a pesar de los esfuerzos realizados.
Lo que han hecho tiene un nombre: falta de ética y profesionalidad. Todo lo demás es demagogia.
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