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Málaga prohíbe el sexo en la calle a menos de 200 metros de viviendas

El Pleno aprueba la ordenanza de convivencia con los votos del PP

Juana Viúdez

El Ayuntamiento de Málaga, gobernado por el PP, aprobó ayer la llamada "ordenanza de convivencia", que establece, entre otros aspectos, la prohibición de mantener relaciones sexuales y de ejercer la prostitución a menos de 200 metros de zonas habitadas. La normativa contó con 16 votos a favor del PP, 12 abstenciones del PSOE y dos votos en contra de IU. Las sanciones por practicar sexo, consideradas de carácter grave, van de los 750 a los 1.500 euros, con un 30% de descuento por pronto pago.

Málaga es la segunda capital andaluza que regula la prostitución con una ordenanza. La primera fue Granada, que aprobó la suya en noviembre de 2009. Ninguna de las dos hace una referencia explícita a la prostitución, ya que no existe ninguna ley de mayor rango que le dé soporte y podrían tener problemas jurídicos. Un grupo de juristas recurrió la ordenanza granadina ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía por considerar que vulnera los derechos fundamentales.

Pedro Moreno Brenes, portavoz de IU en el Ayuntamiento de Málaga, consideró ayer que la normativa supone un "atentado contra la seguridad jurídica" y vaticinó que terminará afectando a "toda Málaga, menos al suelo no urbanizable puro y duro".

El texto, que lleva el nombre oficial de Ordenanza para la Garantía de la Convivencia Ciudadana y la Protección del Espacio Urbano, prohíbe las relaciones sexuales a menos de 200 metros de zonas que "afectan a la convivencia". Entre ellas se incluyen colegios, parques infantiles, zonas residenciales o cualquier otro lugar en el que se realicen actividades comerciales o empresariales. El dinero recaudado por estas infracciones se usará para la integración y la formación de las prostitutas, con especial atención de aquellas que quieran abandonar la actividad.

La ordenanza regula múltiples aspectos de la vida urbana. Establece multas de hasta 750 euros mendigar de manera coactiva o acosadora, e igual cantidad por realizar acrobacias con patines, bicicletas y monopatines fuera de las áreas habilitadas para ello. Prohíbe que los animales beban en las fuentes ornamentales, y que las personas se bañen en ellas, incluso con motivo de "celebraciones especiales". Escupir en la calle se castiga con hasta 750 euros, y verter líquido en un árbol, aunque no sea nocivo, podría costar hasta 1.500 euros.

El edil de participación ciudadana, Julio Andrade, aseguró que la normativa no tiene "afán recaudatorio", ya que para satisfacer las multas se puede recurrir a otras vías, como cursos relacionados con la convivencia ciudadana o trabajos en beneficio de la comunidad. Pero estas opciones son muy limitadas. Sólo pueden aplicarse en caso de que se trate de una infracción leve, que el denunciado tenga entre 14 y 29 años y no sea reincidente.

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Sobre la firma

Juana Viúdez
Es redactora de la sección de España, donde realiza labores de redacción y edición. Ha desarrollado la mayor parte de su trayectoria profesional en EL PAÍS. Antes trabajó en el diario Málaga Hoy y en Cadena Ser. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster de periodismo de EL PAÍS.

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