Los toros de Jandilla, fieles a su leyenda en los encierros
Haciendo honor a la leyenda de ser peligrosos en el encierro y nobles en el ruedo, los toros de la ganadería de Jandilla protagonizaron ayer un último encierro de las fiestas de San Fermín 2010 especialmente duro. Gavioto, un toro colorado que quedó rezagado, se volvió hasta en tres ocasiones y embistió a varios mozos desde el vallado. Los astados de Badajoz realizaron el recorrido en 4 minutos y 23 segundos dejando heridos a once mozos, cuatro de ellos por asta. Aunque el 14 de julio es tradicional y estadísticamente el día en el que menos corneados se registran, no ha sido así este año. También el año pasado, el encierro de esta ganadería fue el más trágico de todos, con el fallecimiento de Daniel Jimeno.
En total han sido 37 los corredores que han tenido que ser conducidos al hospital de Navarra tras los ocho encierros celebrados este año, caracterizados por ser especialmente rápidos y limpios. Tanto Miura como Cebada Gago, dos divisas clásicas en las calles de Pamplona mantuvieron las expectativas.
