_
_
_
_

Inaugurados dos tramos del Cuarto Cinturón

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Deseado por unos y rechazado por otros. Ayer se inauguraron los dos primeros tramos del polémico Cuarto Cinturón. Con dos años de retraso, se abrieron al tráfico 4,9 kilómetros de autovía entre Terrassa y Viladecavalls (Vallès Occidental) y 2,1 kilómetros entre Abrera y Olesa de Montserrat (Baix Llobregat).

El tramo vallesano ha costado 86 millones de euros y se inicia en Viladecavalls, donde se ha construido una rotonda provisional para conectar la nueva autovía con la autopista C-16 y con la carretera C-58. En este punto se accede al polígono de Can Tries, donde se creará un acceso para la multinacional Sony. La vía tiene dos carriles por sentido y se ha hecho reserva de espacio para ampliar a tres carriles. El tramo Abrera-Olesa, con una inversión de 81,8 millones, tiene tres carriles por sentido e incluye dos enlaces con la A-2. El proyecto también ha supuesto la construcción un espectacular viaducto sobre el río Llobregat de 654 metros.

Hay un tercer tramo en obras que dará continuidad a los dos abiertos ayer. El tramo más polémico es el que Unirá Terrassa y Granollers. El Cuarto Cinturón, rebautizado como Ronda Vallès, B-40 o Autovía Orbital, se empezó a planificar hace medio siglo. El proyecto fue heredado por las diferentes administraciones y topó con el rechazo de entidades ecologistas y de los partidos de izquierdas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_