Gil Parrondo, el hombre discreto

En la entrada de la vivienda de Gil Parrondo se conserva una bonita maqueta en madera del escenario de una ópera, Carmen, que nunca se hizo. En la biblioteca, los retratos de tres hermosas mujeres, Rita Hayworth, Marlene Dietrich y Jean Harlow -"sin ellas hubiera pasado la guerra más infeliz"-, se mezclan con los libros, los dibujos y las fotografías que han ido acompañando a este decorador y gran amante del cine en sus 88 años de vida. Y también nuevos guiones, porque Gil Parrondo sigue en activo tras 200 filmes, 2 oscars y 4 premios Goya. En la mesa descansa el último proyecto en el que está trabajando, una historia sobre la vida de Antonio Machado -"una de mis debilidades, he vivido siempre con su poesía", aclara-. Igual que el poeta, este decorador de filmes como Patton (Oscar en 1972), Nicolás y Alejandra (Oscar en 1973), Lawrence de Arabia o Doctor Zhivago, y muchos títulos en España (El abuelo, Ninette, La ciudad de los prodigios o La hora de los valientes, entre otros), se define a sí mismo como un hombre gris, discreto, silencioso y un punto melancólico. Enemigo de los divos, lo que le gusta es pasar inadvertido, aunque no siempre lo consigue. Es conocido que no fue a recoger ninguno de los dos oscars que le concedió la Academia de Hollywood -"entonces los oscars eran otra cosa, no provocaban el alboroto que se produce hoy"-. Estos días, en Almería, se puede ver una exposición en el Palacio Provincial que, bajo el título La realidad proyectada, enseña dibujos, planos, fotografías y diseños de este gran mago de la ilusión en el cine, además de recibir la medalla de oro de la ciudad. "Es muy bonito que se sigan acordando de uno", asegura Parrondo, mientras recuerda las tierras de Almería, donde ha trabajado en 15 películas y ha sido tan feliz. "Es difícil encontrar un sitio como las ramblas, en Almería, esos cauces de ríos secos pero no secos, ese paisaje lunar...". Sigue siendo un gran espectador de cine. Lo único que ha cambiado es el lugar desde donde lo disfruta. Antes era en las salas de cine -"era muy noctámbulo"-, ahora prefiere la comodidad de los DVD en su casa. Se lo ve todo y está al día de los estrenos internacionales y españoles. "El cine español está al mismo nivel que cualquier cinematografía importante del mundo. Tenemos unos nombres de altísimo nivel y talento, como Amenábar y Almodóvar, también Javier Bardem y Penélope Cruz". Pero Gil Parrondo no quiere olvidar a Juan Antonio Bardem y Berlanga, a Saura, a Víctor Erice, a Mario Camus, a Garci. "Y, por favor, mencione también a Isabel Coixet, a Icíar Bollaín y a Gracia Querejeta. Son todos unos talentos indiscutibles".