Llamazares se atrinchera en el voto obrero frente a la llamada al voto útil

En la recta final, unos pescan en caladeros ajenos y otros tratan de marcar territorio. Si el PSOE llama al voto útil de la izquierda de todo perfil y el PP dice representar a los "currantes", a IU, ¿qué le queda? Remontarse a sus orígenes. Hacerse con un electorado del que socialistas y populares no puedan apropiarse, apelar a la clase obrera de toda la vida, y sólo a ella. "Ni trabajadores ni currantes. Vengo a pedir el voto de los obreros, el del movimiento sindical de clase. Nosotros somos la representación del movimiento obrero", anunció ayer Gaspar Llamazares en el mitin central de su campaña, en su tierra, Asturias, ante unos 800 simpatizantes.

Porque su padre solía decirle que "no hay nada más tonto que un obrero votando a la derecha", pero las encuestas muestran que en muchos barrios obreros calan algunos discursos del PP como el referido a la inmigración. Y porque el PSOE está "rebañando votos que no le pertenecen para conseguir la mayoría absoluta", y esos votos robados pueden dejar a IU sin grupo parlamentario. "Los obreros se equivocarán si votan esta vez al PSOE", avisó el candidato de IU, casi rogando que no lo hagan.

Llamazares tiene cuatro días para convencer al electorado de izquierdas de que IU es clave. Cuando el PSOE agita el espantajo de la vuelta de la derecha para asegurar sus votos, IU responde que no, que el PP no va a ganar en ningún caso, y que el único dilema será entre un Gobierno del PSOE que hará "política de derechas" o un Gobierno PSOE-IU y, por tanto, "de izquierdas".

Ayer volvió a ofrecerse para esa coalición, y ya son incontables los ofrecimientos de IU a entrar en un Gobierno con el PSOE: "La garantía de una legislatura de izquierdas es la presencia de IU en el Gobierno", sentenció Llamazares.

A Llamazares -que compareció tocado con un pañuelo palestino- le indigna que Mariano Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero usen "el miedo" para sumar votos. Rajoy, el miedo al inmigrante. Zapatero, a que vuelva a gobernar el PP. "Pido el voto que no se deja asustar ni por el miedo ni por el miedo al miedo", reiteró el candidato de Izquierda Unida. A continuación, empezó a soltar amenazas: un PSOE con mayoría absoluta "sería un desahucio para la izquierda". Volverían, advirtió a los presentes, "los tiempos del reajuste, de la reconversión, de las huelgas generales, de la prepotencia...". Y la prueba de que los socialistas buscan eso, la mayoría absoluta de antaño, es que "han sacado del sarcófago a Felipe González".