_
_
_
_
_

Urkullu insta al Parlamento a actuar como Atutxa sobre EHAK

El País

Iñigo Urkullu siguió ayer el guión de su partido sobre la ilegalización del grupo parlamentario de EHAK. En la línea de la proposición presentada por el tripartito para que sea el pleno de la Cámara de Vitoria y no la Mesa quien decida sobre este asunto, instó a que el Parlamento actúe como lo hizo el ex presidente Juan María Atutxa en 2003, condenado por el Supremo por no disolver a EHAK.

"No es un actuación de las personas, sino de una institución", manifestó en una entrevista a Europa Press para justificar que la decisión sea tomada por la Cámara y no únicamente por los miembros de la Mesa. Según su opinión, el Estado de Derecho y la división de poderes otorga al Parlamento la capacidad de "autorregularse y autoorganizarse".

El presidente del PNV censuró la reacción del PSE y el PP a la iniciativa del tripartito y la defendió porque permite que los grupos "se tengan que retratar en el reconocimiento de una institución soberana o, por el contrario, en el reconocimiento de que el Parlamento es una institución de segunda categoría". Rechazó que se persiga eludir a la Justicia o evitar una condena de la presidenta Izaskun Bilbao: "¿Qué hay de malo en que los propios parlamentarios que han decidido un reglamento del Parlamento vasco vigente sean quienes decidan [sobre la disolución de EHAK]?"

Preocupación del PNV

Urkullu señaló que "somos conscientes" de que más de la mitad de los parlamentarios vascos podrían ser procesados, como ocurrió con Atutxa, Gorka Knörr y Conchi Bilbao, si votan en contra de la disolución. "Es la perversión de la intromisión judicial en el mundo de la política parlamentaria".

El líder peneuvista auguró una "situación caótica" en caso de este masivo procesamiento pero alertó de que algo similar ocurrirá si se ordena la disolución de los grupos de ANV en los ayuntamientos vascos. "Esa es una de las grandes preocupaciones que tenemos en el PNV".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

La ilegalización de ANV, según dijo, puede complicar el trabajo de los otros concejales de los ayuntamientos al aumentar la presión y crearse una "situación muy delicada y de difícil gestión". Manifestó su temor de que en la próxima campaña electoral se reproduzca el acoso de la izquierda radical abertzale a los candidatos del PNV.

Agregó que el próximo gobierno que salga del 9-M debe hablar con ETA, al igual que se dialoga con las guerrillas en Latinoamérica o los que practican el terrorismo en Oriente Medio. "Siempre he defendido que hay que hablar con todo el mundo".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_