Cécilia Sarkozy ajusta cuentas con su ex marido
La justicia autoriza la publicación de un libro sobre la ex primera dama
Nicolas Sarkozy es indigno de ser presidente de la República Francesa. Tiene un grave problema de carácter, un lado ridículo, es tacaño y mujeriego y no quiere a nadie, ni siquiera a sus hijos. Maltrata a sus subordinados y se ensaña con algunos de sus colaboradores, que no son más que una pandilla de jóvenes delincuentes hinchados de poder que se creen los príncipes de París. Esto es lo que piensa su ex esposa Cécilia Ciganer, según asegura en el libro Cécilia la periodista Anna Bitton, confidente durante un tiempo de la que fue breve primera dama de Francia hasta su divorcio, el pasado mes de octubre.
Los abogados de Cécilia intentaron evitar que el libro se pusiera a la venta, pero ayer el Tribunal de Gran Instancia de París anunció que no admitía a trámite la demanda en la que reclamaban, además, una indemni-zación de 200.000 euros por ejemplar.
La decisión ha sido recurrida a una instancia superior, que en todo caso no tomará una decisión antes de dos meses, tiempo suficiente para que se agoten varias ediciones. El libro ya había desaparecido ayer de las estanterías de muchas librerías.
Además de esta biografía no autorizada, esta semana han salido otros dos libros sobre la segunda esposa del presidente: Ruptures, del también periodista Ives Deray, el mismo que la entrevistó tras su divorcio, y Cécilia, la face cachée de l'ex première dame (Cécilia, la cara oculta de la ex primera dama) en la que Denis Demonpion y Laurent Léger aportan un curioso retrato de la vida de una burguesa ambiciosa con escaso bagaje intelectual.
El de Bitton, sin embargo, es el que realiza el retrato más cruel, no sólo del presidente, sino también de ella, porque los comentarios hirientes y despectivos que Cécilia dedica a su marido, recogidos minuciosamente por Bitton, además de erosionar la imagen del presidente de la República, desvelan en quien los emite una personalidad caprichosa, ingenua y retorcida al mismo tiempo, y a menudo delirante, como el relato de la visita a Libia para rescatar a las enfermeras búlgaras, donde ella llega a pedir a sus guardaespaldas que vayan directamente a la cárcel a liberarlas.
El libro, que alcanza hasta las semanas posteriores al divorcio, explica cómo la ex primera dama es una adicta a ir de compras y cómo se queja de su "miserable" pensión. "Incluso renegociando la pensión alimenticia", lamenta Cécilia, "¿qué obtendré? ¿1.000 o 2.000 euros de más? No es con esto con lo que voy a poder vivir y Nicolas no va a dejar que su hijo viva bajo un puente".
¿Cuánta verdad hay en estas confidencias? De momento, Cécilia no ha negado el contenido del libro, sino la exhibición que éste hace de su intimidad. Pero algunas de las afirmaciones que se hacen están siendo contestadas.
Cécilia asegura que se divorció de Nicolas Sarkozy porque seguía enamorada del publicista Richard Attias, "el amor de su vida", el hombre por el que ya abandonó a su marido en 2005. También explica que estaba harta de ser "la mujer de...". Pero Attias lleva ya varias semanas mandando cartas certificadas y enviando a sus abogados a las redacciones de todas las publicaciones de la prensa del corazón francesas para advertirles que procederá contra ellos si publican que vive con Cécilia, lo que el publicista niega rotundamente.
Mientras tanto, la boda del presidente con la ex modelo y cantante Carla Bruni parece cada vez más cerca. Pero la última peripecia referente a la pareja presidencial podría encajar perfectamente en el libro de la Bitton. Una revista francesa publica esta semana una fotografía de la mano de Cécilia luciendo el mismo anillo con forma de corazón que Nicolas Sarkozy ha regalado a Bruni estas navidades. ¿Es el mismo o siempre regala el mismo?
Confidencias tras la ruptura
- "Es tacaño, mujeriego, no quiere a nadie, ni a sus hijos"
- "Maltrata a sus subordinados y se ensaña con sus colaboradores, que son una pandilla de jóvenes delincuentes"
- Otro de los libros sobre la ex primera dama aporta peculiar retrato de Cécilia como la vida de una burguesa ambiciosa y con escaso bagaje cultural
- "Incluso renegociando mi miserable pensión alimenticia, ¿qué obtendré?", se pregunta Cécilia: "¿1.000 0 2.000 euros más al mes?"
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.