Arte solidario a subasta

Bono continúa añadiendo nombres a la lista de celebridades que se unen a sus múltiples campañas para intentar mejorar el estado del planeta. Después de haber conseguido que desde Penélope Cruz a Jennifer Garner posaran para su campaña RED, dirigida a vender productos con la marca RED en tiendas como GAP, Apple o Armani y cuya recaudación se dirige en parte a la lucha contra el sida en África, le ha llegado el turno a los artistas plásticos.

El británico Damien Hirst, que hasta hace apenas un mes ostentaba el título de artista vivo con el mayor caché del planeta -se lo arrebató Jeff Koons tras la espectacular venta en Nueva York de una de sus esculturas-diamante-, le ha ayudado a organizar la que será la subasta de arte contemporáneo caritativa de mayor valor económico de la historia. Hirst ha convencido a las estrellas actuales del arte contemporáneo, esas que revientan cifras ininterrumpidamente desde hace cuatro años en las subastas londinenses y neoyorquinas, para que donen obras para una subasta que se celebrará el próximo 14 de febrero en Sotheby's en Nueva York. Artistas como Jasper Jones, Matthew Barney, Takashi Murakami, Andreas Gursky, Richard Prince, Sarah Lucas, Cecily Brown o el propio Jeff Koons, entre más de 100 nombres de primera fila, se han unido a esta iniciativa que llevará del 4 al 13 de febrero hasta la galería neoyorquina Gagosian -la más poderosa del sector- una exposición con todas las obras, entre las que además habrá siete donadas por el propio Damien Hirst. El valor total de la subasta superará los 40 millones de dólares.

"Con un esfuerzo relativamente pequeño de cada artista podemos salvar muchas vidas. Es maravilloso poder devolver algo a la sociedad y marcar la diferencia", afirma Hirst en un comunicado. Bono le responde: "La lista de artistas es impresionante. Es la mejor colección de arte con los mejores artistas del planeta. Yo amo el arte pero esto es un momento único en la historia. Damien Hirst es demasiado modesto. El esfuerzo de estos artistas es considerable y su impacto inconmensurable". La recaudación se destinará al Fondo Global de Lucha contra el Sida, la Malaria y la Tuberculosis de las Naciones Unidas, al que la campaña RED ya ha contribuido con casi 50 millones de dólares, producto de las ventas de ropa y objetos con la marca RED".