Aprobada la Ley contra el Racismo en el Deporte sin el voto de IU y PNV
La Ley contra el Racismo en el Deporte pasó ayer el trámite en el Senado con los votos en contra de IU y el PNV. Llegaba con un amplio consenso del Congreso, especialmente entre el PP y el PSOE, que en la Cámara Alta presentaron tres enmiendas iguales hasta en las comas. El secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, dijo que la ley estará vigente en la próxima temporada.
La principal crítica de IU es que la ley se fija demasiado en los grandes eventos y no prevé medidas educativas y de prevención en el deporte base. "Cuando unos padres pegan a un árbitro en categoría regional, ¿no es violencia? Cuando se llama "negro" a un niño porque juega en el equipo contrario, ¿no es violencia?", se preguntó Educardo Cuenca (IU). A su vez, Javier Maqueda (PNV) basó su oposición en aspectos competenciales.
Los dos grupos mayoritarios sólo admitieron dos enmiendas del PSC. Una define como forma de discriminación el insulto por razón de origen geográfico o social de la persona.
Otra crítica al proyecto, compartida por IU y el PNV, fue que no recoge muchas de las recomendaciones, aprobadas por unanimidad, que hizo una comisión especial creada en el Senado para analizar este fenómeno. Miriam Blasco (PP) dijo que "hay muchas recomendaciones recogidas, aunque nos habría gustado que se hubiera presentado más tarde y así poder meter más". Patricia Hernández (PSOE) destacó que la ley "acaba con la consideración de niños malos que algunos tenían de ciertas actitudes en las gradas".
Según el PP y el PSOE, la razón de que el Senado no haya convertido en ley algunas de sus propias recomendaciones es que deben figurar en otros proyectos, como el Código Penal.
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