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El proceso para el fin del terrorismo

Zapatero asegura que nadie torcerá su voluntad de intentar el final de ETA

El presidente critica que los populares se manifiesten contra el Gobierno en política antiterrorista

Anabel Díez

Sería conveniente "alguna ayuda" para afrontar el posible fin del terrorismo pero, si no llega, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, seguirá en el intento, y nadie logrará "torcer" su voluntad. Ésta es la respuesta indirecta que ayer dio a la manifestación de víctimas del terrorismo, avalada por el PP, en la que se combatió el diálogo con ETA. Zapatero anunció que, en el futuro, el PSOE "sólo se manifestará contra ETA, si llega el caso, al lado del PP, nunca enfrente". El PSOE cree que el acercamiento al PP es imposible porque ha hecho del proceso el tema central de oposición.

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Proceso

"En ni nombre sí", gritó una mujer a Zapatero, y le siguieron otras personas con la misma frase, en clara réplica a la proclama de la AVT según la cual en nombre de las víctimas de ese colectivo el presidente del Gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero, no puede negociar con ETA. Esa proclama se difundió anteayer por las calles de Madrid en una manifestación movilizada por la dirección del Partido Popular.

La respuesta del presidente del Gobierno llegó al final de un acto convocado para presentar al candidato a la alcaldía de Madrid, Miguel Sebastián, al que asistieron unas 2.500 personas, y otras 500, con enojo, tuvieron que quedarse fuera al quedar desbordado el recinto elegido, el polideportivo de la Fundación ONCE.

Antes de que Zapatero se dirigiera al auditorio, el líder de los socialistas madrileños, Rafael Simancas, le brindó el apoyo del partido y de "buena parte del pueblo de Madrid" para que intente el fin del terrorismo. Y el presidente esperó a los minutos finales del acto para referirse, muy serio, a este asunto. No hubo ni una sola palabra directa de reproche a la manifestación de la AVT aunque sí recriminaciones al PP por su actitud.

"Los socialistas vamos a trabajar por el fin de la violencia, por la paz, que es el gran objetivo, el deseo mayoritario de todos los españoles, después de tantos años". No obvió citar las dificultades, toda vez que el gobierno reconoce, en público y sobre todo en privado, que la situación está en un punto muy delicado y que nada malo puede descartarse del todo. "Como todo gran objetivo, cuesta, exige esfuerzo, inteligencia y sería conveniente alguna ayuda...", Pero después de ese reconocimiento e incluso petición indirecta de apoyo al PP, sentenció: "No nos van a torcer en nuestra voluntad de intentarlo, desde nuestra razón democrática, desde el deber ético y siempre pensando en la paz y en la libertad de tanta gente de Euskadi y de España".

Más que nunca Zapatero quiso dejar en el aire el recordatorio de sus propias palabras respecto a la dureza y largura en el tiempo de este proceso. "Lo importante es que se acabe con la violencia, y no quién acaba con la violencia". A continuación, deslizó la incertidumbre de cuánto puede durar este proceso y qué ocurrirá en el futuro en relación al terrorismo.

De manera indirecta se situó en la oposición. "Los socialistas nos hemos manifestado muchas veces contra el terrorismo y siempre al lado del PP, nunca enfrente", ya estuvieran en el Gobierno o en la oposición. Y sentenció: "A pesar de lo que está pasando, haremos lo mismo en el futuro; sólo nos manifestaremos al lado de los demócratas, al lado del PP, contra el terrorismo y la violencia".

Una y otra vez, en la dirección del PSOE se asegura que el diálogo con el PP sobre este proceso es imposible. En este partido se ha instalado la certeza de que el PP ha tomado la decisión de hacer del posible fin de la violencia el tema central de oposición. Esta certeza la expresaron el pasado fin de semana los miembros del comité federal, singularmente los barones territoriales, cuando pidieron a Zapatero que siguiera adelante en el intento, y que no esperara el concurso del PP. El presidente dijo ayer lo mismo y lo justificó. Tras glosar medidas económicas y sociales de su gobierno, de las que se mostró orgulloso, el PP se queda, a su entender, sin materia de oposición. "Por eso tiene que hacernos oposición con el terrorismo", concluyó.

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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