_
_
_
_
_

La denuncia de una menor permite descubrir una red de prostitución en Fuenlabrada

F. Javier Barroso

La denuncia de una menor de 16 años de origen rumano ha permitido la detención de cuatro personas que se dedicaban a la prostitución en el polígono industrial de La Cantueña, en Fuenlabrada. El jefe de la banda, Claudius Serban, de 31 años, también ha sido acusado de agredir sexualmente a la joven, según informaron fuentes policiales.

Las investigaciones comenzaron hace unos 20 días a raíz de que la menor pudo escaparse y denunciar que había sufrido una agresión sexual y que la obligaban a prostituirse. Los agentes del Grupo VI de la Brigada Provincial de Extranjería y Documentación comprobaron la veracidad de las acusaciones. Según relató la menor, Claudius la había traído a España bajo engaños junto a otras dos mujeres.

Los agentes consiguieron localizar el piso que utilizaba la organización. Se trataba de una vivienda situada en la avenida de las Retamas, 19, en el barrio de Prado de Santo Domingo, en Alcorcón.

Las mujeres eran conducidas todas las mañanas al polígono y siempre las controlaba una mujer rumana, que no se separaba de ellas. Los varones, el jefe del grupo y un español llamado Sebastián González Barba, de 38 años, llevaban a cabo el control de la vivienda. Les impedían salir solas a la calle y las mujeres siempre permanecían encerradas. Todo el dinero recaudado iba a parar a manos de sus captores.

Los agentes mantuvieron la vigilancia del piso hasta que identificaron a todos los componentes. Éstos fueron detenidos a lo largo de esta semana, cuando salían para dirigirse al polígono de La Cantueña.

Todos los arrestados han sido acusados de asociación ilícita y de un delito por prostitución relativo a los derechos de ciudadanos extranjeros. En el caso de Serban, también se le imputa una agresión sexual. Éste hacía continuos viajes a su país en coche para traer mujeres.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Expediente de expulsión

En el piso también había otra mujer que ejercía la prostitución y que adeudaba unos 500 euros a la organización. Contra ella ha sido incoado un procedimiento de expulsión, ya que carece de los permisos de residencia y trabajo.

La denunciante fue sometida a la prueba radiológica de la muñeca para comprobar su edad. El estudio médico reveló que tiene 16 años y siete meses. Se ha integrado en el Proyecto Esperanza para intentar su integración en la sociedad, según fuentes del caso.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_