"A las casas ilegales, ni agua"
Antonio Jesús Verdú, alcalde de Vejer, habla del proyecto de El Palmar
Al alcalde de Vejer (Cádiz, 12.000 habitantes), el socialista Antonio Jesús Verdú, le gusta presumir de playa. De sus nuevos accesos, de la vigilancia, de la limpieza, de la oferta de ocio y deporte... pero, sobre todo, de los valores sostenibles de su desarrollo. El Palmar es uno de los últimos reductos naturales de la costa andaluza, aunque está amenazada por promotores y particulares que han levantado allí casas sin permiso alguno. Contra estos últimos, el Ayuntamiento anuncia mano dura. El primer edil apoya continuar el crecimiento urbanístico de la zona pero bajo un control que evite su colapso.
Pregunta. La playa de El Palmar ha conseguido este año por primera vez la bandera azul. ¿Qué supone este reconocimiento?
"No queremos que El Palmar se convierta en una playa de hormigón"
Respuesta. Demuestra que la hemos dotado de más equipamientos. Estamos trabajando con el Ministerio de Medio Ambiente para proteger nuestro sistema dunar, que nos va a permitir regenerar la arena y recuperar la vegetación autóctona. Hemos mejorado los accesos con 12 pasarelas, sin contar con nuevas especiales para discapacitados.
P. Y con tantos coches, ¿cómo se evita el colapso circulatorio?
R. No queremos que esta playa se convierta en una playa de hormigón. Hemos pedido al Ministerio de Medio Ambiente que atrase la carretera de la línea de playa para tener más espacio de acceso peatonal. Así protegeremos el espacio natural de El Palmar.
P. Es el primer verano con la autovía A-48, que bordea el litoral gaditano y está casi terminada. ¿Se está notando?
R. Es la satisfacción de una vieja demanda. Una buena carretera desdoblada le va a dar mucho juego a El Palmar y al casco histórico. Quedan 5 kilómetros hasta Vejer que estarán muy pronto, y el tramo hasta Algeciras. Nos situaremos muy bien en el mapa, cada día lo tengo más claro: el túnel que unirá África y Europa, indudablemente, entrará en nuestro término municipal o muy cerca.
P. Para muchos, El Palmar es uno de los últimos reductos naturales de Andalucía. ¿Sobrevivirá a la presión urbanística?
R. Hay una ingente cantidad de construcciones ilegales que tratamos de arreglar. Ya hemos derribado algún chalés, con el rechazo de parte de la ciudadanía. Está previsto derribar tres nuevos en los próximos meses y tenemos 300 expedientes sancionadores abiertos. Acabamos de aprobar el Plan Especial de Reforma Interior de El Palmar, que nos ha llevado cuatro años y que es el que lo regula.
P. Ese plan contemplaba legalizar medio millar de viviendas. ¿Va a haber suficientes recursos y servicios para todos como, por ejemplo, agua?
R. Eso lo tenemos hablado con la Junta de Andalucía. A los ilegales no les damos ni agua. Daremos agua a las viviendas que son legales o se puedan legalizar.
P. Se espera que Vejer sustituya la explotación de manantiales por un suministro propio de agua. ¿Cuándo estará listo?
R. Será un hito. Le quedan sólo unos rematitos. En los próximos días, en una o dos semanas,podremos conectarnos ya a la zona gaditana. Abriremos el grifo y pasaremos de depender de unos manantiales propios a estar conectados a la bahía de Cádiz, que es de la que dependen muchos otros municipios. Será muy importante porque pasamos de tomar agua de recursos propios, que eran muy escasos, a cogerla de la región, que nos garantiza el suministro para los restos. Sin agua, no podemos seguir avanzando.
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