El juez deja en libertad sin fianza a cuatro directivos de Afinsa y su proveedor de sellos

El juez Santiago Pedraz decidió ayer dejar en libertad sin fianza a cuatro directivos de Afinsa, Albertino de Figueiredo, Juan Antonio Cano, Carlos de Figueiredo y Vicente Martín Peña, así como a su principal proveedor de sellos, Francisco Guijarro, que se encontraban presos desde hace casi un mes, cuando se destapó el escándalo. El magistrado les ha impuesto diversas medidas cautelares, como la obligación de comparecer cada tres días en el juzgado, la prohibición de salir de España, hacer entrega de sus respectivos pasaportes y facilitar un teléfono móvil en el que estar permanentemente localizables.

Todos abandonaron ayer por la tarde la prisión de Soto del Real, donde unos 300 trabajadores de la compañía celebraron su puesta en libertad. El juez no ha retirado las imputaciones ni los cargos contra ellos, pero ha considerado que ha desaparecido el peligro de que los acusados ocultasen, alterasen o destruyesen las fuentes de prueba, que hubieran dificultado la instrucción de la causa y su posterior enjuiciamiento. También se ha evitado que los imputados actuasen contra los bienes jurídicos de las víctimas y a su entender, el hecho de que los imputados estén en libertad no perjudicará a la causa.

Además, el magistrado señala que "no se deduce que exista un fundado peligro de fuga si se adoptan medidas de control, en concreto constituirse en la obligación de comparecer cada tres días ante este juzgado, así como la prohibición de salida del territorio nacional, con entrega de pasaporte, como asimismo facilitar un teléfono móvil a fin de que puedan estar a disposición en todo momento a cualquier llamamiento judicial". El incumplimiento de cualquiera de esas medidas supondría un nuevo ingreso en prisión. Pedraz, además, señala que ha decidido no imponer fianza alguna por cuanto todos los bienes y cuentas de los imputados se encuentran embargados y bloqueados.

Por otro lado, el jefe de los Servicios Jurídicos de Afinsa, José Luis Plaza, solicitó públicamente ayer el desbloqueo de las cuentas por considerar que la compañía es solvente y puede hacer frente a todas sus obligaciones frente a los clientes de la sociedad. Asimismo, Plaza recordó que la trayectoria de Afinsa, durante sus más de 25 años de historia, se ha caracterizado por el cumplimiento de sus obligaciones y la legalidad y transparencia de su actuación. Negó que se tratase de un negocio piramidal, ya que "es imposible que algo así sobreviva durante 25 años".

El jefe de los Servicios Jurídicos de Afinsa dijo que la intervención judicial de esta sociedad le había supuesto unas pérdidas de 420 millones por la devaluación de las acciones de su filial Escala Group, en EE UU. Igualmente rebatió la tesis de que poseyeran o vendieran sellos falsificados.