El ex alcalde de Torrelles sostiene que un ex edil de CiU tramó su asesinato

El sumario judicial que está investigando la trama para asesinar al independiente Salvador Miralles cuando era alcalde de Torrelles de Foix (Alt Penedès), descubierta por los Mossos d'Esquadra el pasado octubre, incluye la declaración de un detenido que implica directamente al convergente Erasme Torrents, ex alcalde de la localidad, como instigador del complot. Así lo asegura Miralles tras tener acceso al sumario del caso, cuyo secreto fue levantado el lunes. Según Miralles, Sebastián B., uno de los dos sicarios que debían asesinarle, reconoció en un interrogatorio que el otro detenido le citó el nombre de Torrents como instigador del complot y añadió que era la persona que había de pagar 50.000 euros por el crimen.

Los Mossos d'Esquadra descubrieron el tenebroso plan en octubre, cuando los sicarios ya tenían el arma con la que supuestamente iban a asesinar a Miralles, un rifle con mira telescópica adquirido en Andorra. En un primer momento, se sospechó que en la trama estaban implicados dos vecinos de la población propietarios de unos terrenos que Miralles se negaba a recalificar dentro de una amplia operación urbanística. Ahora la declaración del detenido señala que Torrents era el principal instigador.

Miralles formó parte del gobierno local integrado por CiU y el PP entre el verano del 2003 y el del 2004 con Erasme Torrents como alcalde. Luego Miralles pactó con el PSC una moción de censura que le situó en la alcaldía, cargo que ocupó hasta el pasado mes de diciembre.

Desde entonces, Torrents siempre ha reprochado a Miralles y a los socialistas que le quitaran la alcaldía, según afirma, mediante una operación de transfuguismo. En los dos últimos años, las relaciones entre el ex alcalde de CiU y su sucesor han sido muy tensas, sembradas de descalificaciones e insultos mutuos. En diciembre de 2005, Miralles fue sustituido por el socialista Antonio Villanueva en la alcaldía, tal como estipulaba el pacto de la moción de censura.

El ex alcalde Erasme Torrents ha quitado credibilidad a las acusaciones del sicario que le implica en la trama para asesinar a su sucesor. Asegura que él no tiene nada que ver con el complot y sospecha que los investigadores del caso no otorgan demasiada credibilidad a la declaración. Prueba de ello, aduce Torrents, es que, tres meses después del interrogatorio de Sebastián B., ni la policía lo ha detenido ni el juez le ha citado a declarar. Una vez levantado el secreto de sumario, el ex alcalde de CiU espera poder conocer a fondo su contenido y actuar judicialmente si es necesario. Tampoco descarta que el detenido lo haya implicado bajo presión de otras personas.

Por su parte, Miralles asegura no tener motivos para no dar crédito a las declaraciones del sicario y recuerda que fue éste quien alertó a los Mossos de la existencia de la trama tras ser detenido en una operación contra el tráfico de drogas en la comarca de la Anoia. La víctima del complot sospecha que en el caso aún pueden aparecer nuevas sorpresas, por lo que espera que las investigaciones y el proceso judicial concluyan lo antes posible.

Tras descubrirse la trama, las tormentosas relaciones entre Torrents y Miralles llegaron al punto más conflictivo. Miralles aseguró entonces que tras los detenidos había alguien más y, aunque nunca mencionó públicamente el nombre de Torrents, no ahorró insinuaciones que apuntaban al ex alcalde de CiU como principal instigador del plan que debía acabar con su vida. Las insinuaciones motivaron que Torrents presentara contra su sucesor una querella por calumnias, que no se ha admitido a trámite.

La dirección de CiU en el Alt Penedès ha salido en defensa de Torrents y pide que se respete la presunción de inocencia. Los convergentes señalan que no se puede dar credibilidad a "alguien que está dispuesto a cobrar un dinero a cambio de asesinar".