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Navantia nace con pedidos para dos años y medio por valor de 3.600 millones

La sucesora de Izar da el primer paso para la constitución de un consorcio naval europeo

Navantia, la empresa que aglutina a los seis astilleros segregados de Izar (Ferrol, Fene, Cartagena, Cádiz, Puerto Real y San Fernando), nace con una cartera de trabajo de 3.600 millones de euros, lo que supone carga de trabajo para dos años y medio. El objetivo del grupo estatal es facturar 1.400 millones al año, principalmente en la construcción naval militar. La nueva compañía, presentada ayer por el ministro de Economía, Pedro Solbes, resuelve por ahora la crisis de los astilleros públicos y es el primer paso para la creación de un consorcio europeo de construcción naval.

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Para la puesta de largo de Navantia se eligió el salón de la antigua sede del Instituto Nacional de Industria (INI) -luego Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI)- en la plaza del Marqués de Salamanca. Pedro Solbes abrió la sesión, a la que asistieron representantes del Gobierno, empresas y sindicatos, con un resumen sobre la solución dada al sector y dando carpetazo a una nueva reconversión naval, la cuarta en los últimos 20 años. "Este Gobierno ha resuelto un problema crónico como era el de los astilleros públicos heredado del anterior Gobierno y que permaneció larvado durante dos legislaturas. Se ha resuelto para dar viabilidad futura a un sector y de forma dialogada con los sindicatos", recalcó Solbes.

Tal y como se acordó el pasado 16 de diciembre con los sindicatos, Izar estaba obligado a entrar en liquidación al finalizar el año 2004, ya que tenía que devolver 1.200 millones de ayudas públicas ilegalmente concedidas entre 1999 y 2000. Tras seis meses de negociaciones entre la SEPI y los sindicatos y con una fuerte contestación sindical en los centros, el pasado diciembre se cerró un acuerdo al que se había comprometido el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, como se encargó ayer de recordar Solbes.

La constitución de Navantia cumple el primero de los tres ejes del acuerdo firmado con los sindicatos y autorizado por la Comisión Europea el pasado 19 de enero: la segregación de los centros de actividad militar de Izar (Ferrol, Cartagena, San Fernando, Cádiz, a los que se agregaron Fene y Puerto Real, que no hacían barcos de guerra, y las oficinas centrales en Madrid) en una nueva sociedad.

La plantilla de la nueva empresa, que se dedicará a la construcción naval militar y que podrá construir barcos civiles hasta el 20% de su facturación, está compuesta por 5.562 trabajadores, de los que 1.000 son ingenieros. El objetivo es alcanzar una facturación anual de 1.400 millones de euros, 300 millones más al año de la cifra de negocio agregada de los centros que integran la nueva empresa, según señaló ayer el presidente de la SEPI, Enrique Martínez Robles. De ese total, 220 millones será para los mercados exteriores.

La cartera de pedidos actual de Navantia la componen seis fragatas y un buque de proyección para el centro de Ferrol, los ocho submarinos que ejecuta el centro de Cartagena, las 12 lanchas de desembarco y un ferry del San Fernando y un buque de apoyo que fabrica el centro de Puerto Real.

Liquidación de Izar

El segundo compromiso era la venta, bien en bloque o bien en parte, de los cuatro centros de actividad naval civil (Gijón, Sestao, Manises y Sevilla). La venta de estos centros comenzará a negociarse el próximo mes de abril.

La tercera pata era el ajuste laboral, consistente en la prejubilación de los 4.028 trabajadores (el 38% de los 11.077 es la plantilla total) que al finalizar 2004 contaban con 52 años de edad. La regulación de personal tendrá un coste para el Estado de 1.200 millones de euros. Izar, cuya liquidación ya está aprobada por el consejo de la empresa, entrará en liquidación cuando lo apruebe la junta de la empresa a finales de marzo, aunque terminará los trabajos en curso de la parte civil.

Solbes (en el centro) saluda a Cándido Méndez en presencia de Enrique Martínez Robles.
Solbes (en el centro) saluda a Cándido Méndez en presencia de Enrique Martínez Robles.CRISTÓBAL MANUEL

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