El presidente de Iberia negociará con Airbus la renovación de la flota

El Consejo de Administración de Iberia acordó ayer delegar en el presidente de la compañía, Fernando Conte, el mandato para negociar los últimos flecos para la renovación de la flota de corto y medio alcance con el consorcio Airbus. El grupo europeo ha hecho un considerable descuento a su oferta para ganar la partida a Boeing. Están en juego 30 aviones y la opción de otros 40. El montante, cercano a los 700 millones de euros, al ser en régimen de leasing. En la actualidad, la flota de Iberia alcanza un total de 217 aparatos. Si finalmente Airbus gana el contrato, toda la flota sería de este consorcio.

El presidente de Iberia, por encargo del consejo, será quien, a partir de ahora, negociará personalmente con los dos fabricantes aeronáuticos para renovar su flota de corto y medio plazo con un total de 70 nuevos aviones que la aerolínea española incorporará en régimen de leasing a su flota. Fuentes del sector ya habían apuntado que el consejo de la aerolínea apostaría por continuar negociando a la baja con las dos compañías aeronáuticas para aprovechar el enfrentamiento entre ambos fabricantes.

En concreto, Iberia negocia la sustitución de sus 37 aviones McDonnell Douglas (24 aparatos MD-87 y 13 MD-8), otros 17 Boeing B757, así como las 22 unidades más antiguas del modelo 320 de su flota, hasta un total de 76 aviones. Aunque el pedido puede quedarse en 70 aparatos.

Para sustituirlos, la aerolínea se decantará bien por aviones de la familia A320 (A318, A319, A320 y A321) de Airbus, o bien por los modelos equivalentes de la nueva familia 737 de Boeing, desde el 737-600 al 737-900, según fuentes de Iberia. A precio de mercado, el pedido está valorado en unos 4.000 millones de euros, aunque la fórmula de leasing elegida por Iberia para adquirirlos disminuirá el desembolso de la aerolínea hasta unos 700 millones de euros.

En estas últimas fechas, tanto Airbus como Boeing habían hecho hincapié en la importancia del pedido para sus respectivas casas, sin ocultar sus esperanzas en que del consejo de administración de Iberia celebrado ayer saliera la decisión definitiva. Las direcciones de las empresas se han movilizado en las últimas semanas para lograr colocar sus opciones en la mesa de decisión de Iberia.

En los últimos siete días, Iberia ha recibido la visita del presidente de Boeing, Harry Stonechiper, y del director comercial de Airbus, John Leahy, para impulsar personalmente sus respectivas opciones.

En su visita a Madrid, el presidente de Boeing manifestó la semana pasada su preocupación respecto a la posibilidad de una "injerencia política" procedente de la Unión Europea que contaminase la negociación comercial e inclinase la decisión de Iberia a favor de Airbus. El pasado miércoles, y en respuesta a estas declaraciones, el director comercial de Airbus se jactó ante la prensa de que sus aviones son "Mercedes" frente a los "Fiat" de Boeing, en alusión a una supuesta superioridad técnica y operativa de los aviones de la constructora europea respecto a las aeronaves de la factoría de Seattle.

Desde el año 1998, Iberia ha hecho tres grandes renovaciones de su flota. En febrero de ese año efectuó la mayor renovación de su flota con la compra de 76 aviones de corto y medio alcance del fabricante Airbus. El montante de esa operación ascendió a 400.000 millones de pesetas (2.404 millones de euros) aunque se incorporaron en propiedad, leasing y leasing operativo.

En septiembre de ese mismo año abordó su segunda gran renovación, esta vez en el largo radio, con la incorporación de 11 nuevos aviones Airbus 340. El importe de esta operación se elevó a 200.000 millones de pesetas (1.200 millones de euros) y los aparatos comprados se fueron incorporando desde ese año hasta 2003 para desarrollar el plan de expansión de vuelos de largo recorrido.

En 2003 aborda la tercera gran renovación con la compra de nueve Airbus A340 para sustituir a los nueve Boeing 747 que utiliza la compañía en el largo radio. Iberia completaba con esta tercera compra su apuesta clara por el fabricante europeo en los últimos siete años.

Esta uniformidad en los pedidos ha hecho que Boeing haya acusado a Iberia de ponerse en manos de un solo proveedor caso de que vuelva a optar por Airbus. Por su parte, esta firma europea ha acusado a Boeing de vender aviones a precio saldo con tal de hacer caja.