Polémica en Ronda por la subida de sueldos de los concejales

Seis semanas después de la moción de censura que desbancó a la socialista Isabel Aguilera de la alcaldía de Ronda, el nuevo equipo de gobierno del municipio malagueño, formado por PA, GIL y PP aprobó en la noche del jueves su primera decisión polémica: un aumento del gasto para sueldos de los ediles del tripartito y sus cargos de confianza del 54%, lo que supondrá un gasto superior a los 600.000 euros anuales, según denuncian PSOE e IU.

El tripartito tendrá 10 concejales con dedicación exclusiva, que cobrarán un bruto de 2.309 euros mensuales, más el alcalde, el andalucista Antonio Marín Lara, que percibirá 3.677 euros. Es decir, todos menos el delegado de Turismo, Daniel Harillo (PA), que no la ha pedido porque conserva su trabajo. "Mantenemos el mismo sistema retributivo que aprobó el PSOE, sólo hemos posibilitado que el resto de concejales con delegación puedan cobrar la dedicación exclusiva", explica Harillo, que asegura no se ha tocado el presupuesto para este año, y que el mayor gasto en salarios "se derivará de otras partidas, con movimientos mínimos".

Según él, durante el último año, en el que gobernó el PSOE en coalición con el PA, "sólo cinco concejales tenían dedicación exclusiva, y ahora son 10, por el nuevo reparto de delegaciones". Aguilera, portavoz socialista, critica que "10 concejales han pasado a dedicación exclusiva con categoría de funcionarios del grupo A, con jefatura de área, aún sin funciones, como la concejala de Relaciones Institucionales, del GIL, que es un cargo simbólico". "El escándalo es que el PA siempre ha mantenido que sólo estaba justificado para los delegados de Obras Públicas y Urbanismo y el de Economía y Hacienda", añade.