Un 'quad' biplaza

- TRACCIÓN 4×4 Y REDUCTORA

El Max monta el mismo motor monocilíndrico de 400cc y refrigeración por agua del Outlander monoplaza. Va acoplado a un cambio de variador automático con embrague centrífugo como el de los escúteres, y aunque la potencia no se declara (como en la mayoría de los quads), es suficiente para mover bien el peso y ofrece una respuesta siempre muy suave y con cierta contundencia.

También destacan las suspensiones independientes en las cuatro ruedas, con un doble basculante en las traseras muy bien diseñado que aporta una comodidad sobresaliente al pasajero. Además, los reglajes son más enérgicos que los del Outlander normal para poder afrontar los mayores esfuerzos que implican el segundo pasajero y el mayor peso del conjunto, unos

20 kilos más.

El sistema de tracción 4×4 incluye marcha atrás y se puede desconectar para circular sólo con tracción trasera (asfalto, caminos en buen estado...). Lleva una reductora conectable a baja velocidad sin tener que parar y los frenos cumplen bien su cometido.

- EXPERIENCIA COMPARTIDA

Hacer excursiones en quad con un acompañante es una experiencia muy agradable. La segunda plaza del Max está bien resuelta: el pasajero va sentado algo más alto que el conductor, tiene un buen campo de visión y cuenta con un respaldo que mejora el confort y evita que se deslice hacia atrás en aceleraciones fuertes o subidas pronunciadas. El diseño permite también que el acompañante vaya bien sentado con los pies sujetos en unas estriberas antideslizantes y con unos asideros para agarrarse en el asiento.

El Outlander Max es un quad muy divertido de conducir que permite disfrutar sus virtudes en compañía. En las pistas forestales se desenvuelve de maravilla circulando sólo con la tracción trasera. Y tanto la tracción 4×4 como la reductora aportan unos recursos espectaculares para vadear riachuelos, superar zonas trialeras difíciles... Además, lo hace todo bajo la mirada del pasajero, que cuando conoce la aptitudes del vehículo y se relaja puede ayudar de forma activa moviendo el cuerpo para ayudar en los obstáculos más complicados.

EL BOMBARDIER Outlander Max es un quad biplaza y está pensado para conquistar a los usuarios de estos vehículos que quieren disfrutar su afición en compañía, ya sea con la familia o los amigos, pero sin sacrificar el espacio, la comodidad y la seguridad habituales de estos vehículos. Tiene un precio de 11.150 euros, y como está homologado para poder llevar un pasajero, ofrece un argumento extra que le sitúa aparte del resto de modelos disponibles en España.

El Outlander Max presenta también una estética diferente a la de la mayoría de los quads, con un toque futurista que le distingue. A primera vista llama la atención el parachoques delantero y, sobre todo, el asiento biplaza con respaldo y dos alturas, que le distingue de los modelos convencionales.

La distancia entre ejes es también mayor que la de los quads monoplaza:

20 centímetros más que el Outlander del que deriva. Y esta solución permite que el piloto y el pasajero vayan sentados por delante del eje trasero, lo que mejora la estabilidad sin perder manejabilidad, tanto cuando se circula en solitario como acompañado.

Por lo demás, el Max sigue la tradición de Bombardier y cuenta con una carrocería y unos materiales plásticos de excelente calidad, muy buenos ajustes entre las piezas y una alta resistencia a los roces y arañazos.